Insulto a la inteligencia y oscurantismo

Lorenzo Aguirre

En el mes de julio de cada año, el mandatario español Pedro Sánchez – hoy presidente en funciones – hacía una rueda de prensa a efectos de informar lo acontecido, pero en esta oportunidad escapa a la misma, hecho que, de ahora en más, la ultraizquierda española deberá guardar silencio y no criticar el accionar del expresidente Mariano Rajoy, por no poner al corriente de la ciudadanía los logros alcanzados, como también la problemática que atravesaba el país, y las medidas a abordar. Pedro Sánchez, evita responder a preguntas incómodas, pero, entre tanto apretujón no ha podido zafar, y en buena medida está claro su perfil y ambición, de cara a otro período de gobierno.

Pedro Sánchez, muestra de forma transparente que no desea saber nada sobre nuevas elecciones, y en una situación como la que se vive, tanto Sánchez, como el candidato Núñez Feijóo – quien ganara los recientes comicios desde el aspecto de votos, aunque no alcanzara los 176 escaños para obtener mayoría absoluta -, deben colocar los pies en la tierra, reconocer que no queda otra que hablar con los de su misma corriente, y juntar votos. No hacer como el líder del “PP”, pretender mantener distancia con “Vox”, “porque es una derecha radical” …  ¿acaso, Feijóo, no lo sabía desde el principio? … ¡a fin de cuentas también están las izquierdas radicales, pero igualmente hacen alianzas para echar por tierra a sus opositores, y luego, continúan ocupándose de sus asuntos internos!

Recientemente, Pedro Sánchez, manifestó: “estoy convencido que existe una mayoría social para seguir avanzando, es más, estoy persuadido que, esta mayoría social puede incluso incorporar a personas que se fueron del gobierno progresista por la fatiga de estos años tan duros, o por la extensa propaganda desplegada por “PP”, y “Vox”.

Luego, Sánchez, agrega: “toca, ahora, traducir esa mayoría social en una mayoría parlamentaria en el Congreso de los Diputados, y es lo que vamos a hacer en cuanto se constituya Las Cortes, y trabajar para lograr una investidura que nos permita seguir trabajando cuatro años más”.

Por lo expresado, el chaval no piensa tocar nada, dejando entonces en evidencia su comportamiento, y reafirmando la nula respuesta a su contrincante Alberto Núñez Feijóo, cuando este – totalmente ingenuo…, quizá, a estas alturas deberíamos decir, tonto – le manda una carta en la cual le tiende una mano diciéndole que busca un diálogo responsable en beneficio de la estabilidad política e institucional de España, y también de la confianza que debe inspirar en el extranjero. 

Cuando se habla de seguridad, de tranquilidad en el extranjero, me imagino en referencia a inversiones, a la Unión Europea, pero, el silencio absoluto por parte de Sánchez demuestra una vez más su ordinariez, sus “virtudes” cuando socarronamente busca votos de cualquier lado, porque todo le sirve, como apoyo de líderes de Cataluña fugados de la justicia, y asesinos en País Vasco.

Por lo expresado, ni partido de Estado, ni diálogo con la oposición, porque al mandatario en funciones le importa un bledo – parafraseando a Clark Gable, en “Lo que el viento se llevó” – escuchar, luego considerar y sacar conclusiones sobre caminos alternativos. De esa forma, queda la soberbia de Sánchez, sus desprecios, la falta de valores – ¡si esa carta fuera de “Junts per Catalunya”, o “Esquerra Republicana”, se convertiría en un servil reptando! -, como asimismo la “esencia” que tiene como presidente España.

Quizá, Pedro Sánchez continúe otros cuatro años más, aunque ni siquiera respeta los resultados electorales, al decir: “hasta hace unos días había una pregunta en el aire… ¿España, seguirá avanzando, o son mayoría quienes desean el retroceso que proponían el “PP”, y “Vox”? Posteriormente, Sánchez, agrega: “el mensaje de las urnas ha puesto en evidencia que, quienes proponen la derogación y el retroceso, no son mayoría, y que, por tanto, España, puede seguir creciendo y creando empleos a tiempo que seguimos avanzando en derechos sociales y convivimos en la diversidad”.

¡Caradura, cien por ciento!

“Coalición Canaria” – “Vox”

En “Coalición Canaria” (posición: centrismo, defiende la unidad de España, estando obviamente en contra de independentistas, y del derecho de autodeterminación), la diputada Cristina Valido ha desacomodado la “cadera derecha” donde se apoya – desde donde gobierna -, y ahora quiere descansarla un poquitín; en efecto, doña “Cris” pone en ejercicio – a efectos de no perder musculatura – la nalga izquierda, pues, si bien hasta la semana pasada mantenía el veto a “Vox”, y a “Sumar”, o sea,  no apoyaba al “PP” si este se unía con “Vox”, y de igual forma al “PSOE”, si contraía matrimonio con “Sumar”, ahora, la chavala arregló con maquillaje nuevo una “pequeña diferencia”, al manifestar: “es verdad que nosotros con la ultraderecha mantenemos distancia. También con “Sumar” tenemos diferencias, pero en algún momento hemos apoyado cuestiones, por tanto, no estaríamos a la misma distancia de uno, que del otro”.

¡Traducido al catalán!… ¡“Vox”, no!…  ¡“Sumar”, si!

Aquí, llegó el momento de las negociaciones, y de los “presupuestos para mi bolso”. ¿No?

De esta manera, estimados lectores, hay que estar atento a los “matices” políticos, no a las transparencias, porque si usted realmente las espera, vaya buscándose algún cómodo sillón para no estar mucho tiempo de pie.

Por otro lado, la gente de Santiago Abascal (“Vox”), está presionando a Núñez Feijóo para que se “mueva más a la derecha”.

La frase viene a cuento porque, el candidato del “PP” envió la famosa “epístola” a Pedro Sánchez, y “Vox” lo ha considerado “una verdadera estupidez”.

El “PP”, estaba rechazando la hoja de ruta de Abascal, y dejó claro que empezaba a buscar apoyo de socialistas, e incluso demostró abrirse para “cambiar ideas” con “Junts”, hecho que, si terminara con una alineación, en poco tiempo podría provocarse un colapso en el “Partido Popular”, el cual está navegando sin rumbo, y donde las contradicciones son múltiples.

A modo de ejemplo: el vicesecretario de “Coordinación Autonómica del Partido Popular”, Pedro Rollán, dio fe de la disposición de conversar con “Junts”, en relación a la investidura de Alberto Núñez Feijóo, pero, la “Secretaria General del Partido Popular”, Cuca Gamarra, dijo lo contrario, y afirmó: “esa posibilidad no está en la mesa de trabajo”. Más tarde, acotó: “jamás se hablará con “Junts,” porque el “PP” es un partido serio, predecible, y previsible”.

Veremos en pocos días qué cosa sucede con las palabras de doña Cuca, como asimismo con la “virtudes” de los representantes de los partidos políticos de un lado y otro, y por supuesto, con la vigencia de la famosa frase: “¡cada uno tiene un precio…  es cuestión, dar con ello!