Por desplome del petróleo; combustible baja en todo el mundo
En Uruguay se mantienen los precios de los refinados sin modificación
Por José Luis Ituño
El escenario presentado a partir de la hora 0 del jueves 1ro, de mayo en materia de precios de los combustibles, revela una diferencia interesante entre los movimientos internacionales en los precios del petróleo y las decisiones tomadas por las autoridades regulatorias locales, específicamente la URSEA y el MIEM, en relación con los precios de los combustibles en Uruguay.
A nivel global, la caída significativa del petróleo en mayo de 2025 — impulsada por la desaceleración de la demanda mundial y las medidas adoptadas por EE.UU. con China, que han provocado bajas de aproximadamente 15 dólares por barril — ha llevado a una tendencia a la baja en los precios de los combustibles en el Mercosur en países vecinos como Argentina, Brasil y Paraguay, que han ajustado sus precios en línea con la caída del crudo, reflejando una tendencia claramente bajista en el mercado de la región sudamericana.
ARGENTINA REBAJA DEL 4%
En Argentina, por ejemplo, YPF anunció una reducción del 4% en el precio de las gasolinas en todo el país para mayo, y en Brasil, Petrobras ha ajustado el precio de sus refinados hacia abajo, lo que se ha traducido en una disminución de los precios en las estaciones de servicio brasileñas.
PARAGUAY DOS PESOS MENOS POR LITRO
Paraguay, a través de PETROPAR, ha anunciado una rebaja de 300 guaraníes (equivalente a aproximadamente 2 pesos uruguayos) en todos sus combustibles, y los precios actuales en Paraguay (como un litro de nafta Super 95 a unos 36 pesos uruguayos) reflejan estos ajustes.
Sin embargo, llama la atención que, pese a la caída del petróleo y la tendencia internacional a la baja, la URSEA haya presentado el documento “Precio Paridad de Importación” mostrando un aumento en los precios de las gasolinas en Uruguay.
DESCONEXIÓN
Esto resulta dicotómico, ya que indica una posible desconexión entre los movimientos internacionales y las políticas o decisiones locales.
La “incógnita” que surge es por qué, en un contexto global de precios en descenso, en Uruguay se mantiene o incluso se incrementa el precio de los combustibles.
Esta situación puede deberse a varios factores, como costos internos, políticas tarifarias, márgenes de distribución, impuestos, o decisiones regulatorias específicas.
URUGUAY A CONTRAPELO
La comparación con los vecinos sugiere que, en general, los países de la región están aprovechando la caída internacional para reducir los precios, mientras que Uruguay podría estar adoptando una postura distinta, quizás por razones estructurales o estratégicas.
La discrepancia entre la tendencia internacional a la baja en los precios del petróleo y la aparente estabilización o aumento de los precios en Uruguay plantea una interrogante sobre las políticas regulatorias y de mercado en el país, y deja abiertas varias hipótesis sobre las motivaciones y efectos de dichas decisiones.
MINISTRA CARDONA TIENE LA RESPUESTA
A esta interrogante solo tiene la respuesta la ministra de Industria y Energía, Fernanda Cardona, quien anunció un nuevo sistema de fijación de precios de los combustibles en conjunto con el MEF, que tenga en cuenta las recomendaciones de URSEA en su PPI, pero también otra serie de factores como la cadena de distribución.
