Triunfó Orsi por más de lo previsto

y arranca ya la transición

Jorge Bonino

Con casi un 90% de participación de ciudadanos habilitados para votar y un margen porcentual algo mayor de lo que se preveía, la fórmula Yamandú Orsi – Carolina Cosse resultó ganadora en el balotaje realizado ayer domingo 24 de noviembre. A 40 años de la elección presidencial con la que puso en marcha la restauración del Estado de Derecho (aniversario que se cumple hoy), el pueblo uruguayo en paz y con auténtico espíritu democrático, eligió a quienes encabezarán los Poderes Ejecutivo y Legislativo en el quinquenio 2025-2030.

Con alta temperatura no solo meteorológica sino también emocional, transcurrió toda la jornada de ayer. Un verdadero “enjambre” de periodistas de medios nacionales e internacionales siguieron los pasos de cada uno de los integrantes de las fórmulas presidenciales, del Presidente y la Vicepresidenta de la República, de los ex Presidentes Julio María Sanguinetti, Luis Alberto Lacalle Herrera y José Mujica, de ministros, legisladores y demás personalidades del quehacer político.

El nivel de abstención a nivel nacional  de 10,5% se ubicó dentro de los guarismos previsibles, aunque hubo en algunos Departamentos donde se superó ampliamente el nivel de votación, como en el caso de Rocha, en que se llegó a una votación de 95%, pero claro está, por cantidad de votantes habilitados el peso en ese caso es poco significativo sobre el total general.

FA MUY FIRME EN ÁREA METROPOLITANA Con los datos parciales existentes al momento del cierre de esta edición, la fórmula ganadora logró la mejor votación como era de esperar en el área metropolitana, en particular en los Departamentos de Canelones y Montevideo, de donde eran Intendentes los dos candidatos. A su vez, la fórmula de la Coalición Republicana logró una buena performance porcentual en casi todos los demás departamentos, siendo muy significativa la diferencia en términos porcentuales alcanzada en Rivera, donde en cantidad de votos  estuvo cerca de duplicar a los candidatos del Frente Amplio. Fuera del área metropolitana (Montevideo, Canelones y San José), el FA también votó mejor que la Coalición en Salto y Paysandú.

Las primeras tendencias del resultado del balotaje se dieron a conocer por las consultoras de opinión pública sobre la hora 20:30, marcando en todos los casos el triunfo de Orsi y oscilando las estimaciones entre 48,7% y 50,1% para el candidato del FA, y entre 45,7% y 46,6% para el de la Coalición Republicana.

La Corte Electoral fue informando los resultados de los escrutinios a medida que fue recibiendo la respectiva información, o sea a pocos minutos de haberse culminado el horario de votación, pero el ritmo de entrega de la información como es habitual se fue acelerando después de la hora 22.

QUÉ PASÓ Y POR QUÉ DE OCTUBRE A NOVIEMBRE El resultado, que si bien está dentro de lo que se consideraba como posible (al igual que si se hubiera dado a la inversa), abre mucho espacio para el análisis que se podrá ir procesando a partir de hoy, ya que el esfuerzo desplegado en todo el país por los integrantes de las dos fórmulas, así como los demás referentes del FA y de la Coalición Republicana generaba, a nivel de muchos dirigentes, una expectativa de una diferencia no mayor a un punto porcentual a favor de cualesquiera de las dos. En particular, habrá que tratar de interpretar dónde y por qué perdió votos la Coalición Republicana y dónde y por qué ganó votos el FA, entre el 27 de octubre y el 24 de noviembre.

Antes de las hora 21:30 el Presidente de la República Luis Lacalle Pou felicitó a Yamandú Orsi, en tanto que minutos después de esa hora Álvaro Delgado reconoció públicamente el triunfo del FA, con un discurso -en el que estuvo acompañado por todos los dirigentes de la Coalición Republicana- en el que reafirmó su espíritu negociador y de apoyo a aquellas iniciativas que no vayan contra sus principios y que se consideran de importancia para el país, recordando que así fue como en su momento actuó Wilson Ferreira Aldunate.

EXPECTATIVA POR EVOLUCIÓN DE LA COALICIÓN Con el saludo a Orsi del Presidente Lacalle y con la afirmación de Delgado de que hay que buscar la forma de que los acuerdos se concreten por el bien del país, se puede decir que se puso en marcha la transición gubernamental y la negociación de cara a la instalación del futuro Parlamento, que asumirá el 15 de febrero próximo.

Orsi en su discurso, que efectuó  inmediatamente después del de Delgado, agradeció a toda la ciudadanía y dijo que iba a llevar adelante las ideas que lo consagraron Presidente pero que también va a escuchar atentamente a todos.

Hoy mismo pues arranca un período al que todos seguramente seguiremos con mucha atención, porque lo que ocurra en los meses de diciembre y de enero será de particular trascendencia para  imaginar lo que podemos esperar por lo menos del primer año de gobierno, que es cuando debe elaborarse y aprobarse el presupuesto quinquenal que enmarcará el accionar de la futura administración Orsi.

Dentro de las incógnitas a develar a la brevedad está la referida nada menos que a cuál será a corto y mediano plazo el futuro de la Coalición Republicana, ya que por ejemplo el líder de Cabildo Abierto Guido Manini Ríos, en forma previa al balotaje, puso en duda la lógica de mantener esa unidad en caso de derrota.

También dentro de la Coalición Republicana hay que observar cómo se desarrolla el proceso de gobernanza interna del Partido Colorado, que aún debe elegir a sus nuevas autoridades y en particular a su secretario general.

En el caso del Partido Nacional, por otra parte, queda pendiente saber si finalmente Lacalle Pou asumirá como senador, caso en el cual no habrá dudas sobre quién liderará las posiciones de esa colectividad política. Empero, si Lacalle Pou no asume su banca, puede ser que opte por dejar en manos de Delgado esa conducción o quizás igualmente podría ejercer en forma visible y abierta el protagonismo principal.

INCÓGNITA SOBRE PESO DE SECTORES DEL FA Del lado del nuevo gobierno la mayor interrogante está dada por en qué medida el MPP y el PCU harán valer, en el caso del primero el peso electoral y el hecho de que Orsi proviene de esa fuerza y en el caso de los comunistas el que hayan sido el principal apoyo de Cosse, que será quien presidirá el Senado (donde el FA es mayoría) y la Asamblea General. Del grado de esa pugna y de su eventual resolución dependerán las posturas de gobierno y posiblemente también la integración del futuro gabinete ministerial y las numerosas designaciones en posiciones ejecutivas.

Además, será muy importante observar lo que ocurrirá con los futuros diputados, ya que al no tener mayoría ningún bloque mayoría en la Cámara de Representantes, la negociación adquirirá allí una significación mucho mayor a la habitual y quien ejerza su presidencia, sobre todo durante el primer año, jugará un papel definitorio para el logro o no de acuerdos, que obviamente serán esenciales para la gobernabilidad del país.

Por otra parte, cabe esperar un arranque bastante rápido de motores de cara a las elecciones departamentales y municipales de mayo próximo, que en muchos lugares ya se fue perfilando en la campaña realizada para las elecciones de octubre último. Eso seguro generará focos de fuerte disputas partidarias en momentos en que la concordia y la articulación interpartidaria deberían imponerse.