El trabajo y la seguridad social

barranca abajo

Pablo CAFFARELLI

En el gobierno que ya estrenó su primer ministro a la baja -por descubrírsele conductas muy contrarias a la buena ética pública en lo general y en lo que es el ejercicio como punta de lanza de la cartera de, justamente, vivienda y ordenamiento territorial en particular- tampoco parece que se ha hecho la mejor opción en la órbita del Trabajo y la Seguridad Social.

En sus primeras declaraciones Castillo se mostró abocado a incrementar cargas fiscales a las empresas, dando a entender que se puede “dar” otro poco más. La respuesta no se hizo esperar: Yasaki dejó un saldo de 1200 empleados en la calle, La Fábrica Nacional de Cerveza al final no cerró en Minas pero sí comenzó un proceso de despido de 80 empleados, en lo más reciente tuvimos el tema de Paycueros con sus más de 50 obreros desafectados…. Y hay más mucho más, por decir algunos Calcar, La Vienesa, Eurofarma y la cuenta sigue…

Más o igual de preocupante es la situación de las “pequeñas” empresas. Por mi barrio cerró primero una gran juguetería con más de 10 empleados, otra más pequeña trabajada por su propia dueña, y ahora una tercera que llegó a emplear a tres personas. Al parecer al rubro juguetería y varios otros de diferentes sectores económicos el efecto “Temu” les está terminando de hacer caer “barranca abajo”. Si sumamos cada uno de estos cierres en el mercado de las pequeñas empresas los números se ponen tan rojos como los de las grandes compañías internacionales.

Y es que en el país donde el ministro designado al MTSS solo piensa en aumentar cargas tributarias en lugar de dar beneficios fiscales al comercio está pasando lo lógico: Cierre en cadena de grandes y pequeñas empresas. Las grandes porque miran para los costados y encuentran mejores condiciones y rangos de ganancia en los países de la región (Argentina, Brasil y Paraguay mayormente). Y las chicas porque ven, incrédulos, como se permite que las personas traigan libre de todo impuesto lo que quieran del exterior (hoy muy acelerado por la empresa de origen Chino Temu) mientras que a ellos se los hace importar pagando hasta un 80% de sobrecostos en impuestos y gastos, pagar DGI, BPS, sueldos, alquileres, servicios, pautas de publicidad y un sinfín de etcéteras.

Parece muy injusto poniendo las cosas así en un papel. Parece muy equivocada la mirada del ministro y su equipo. Parece que en poco tiempo tendremos una tasa de desocupación preocupante y aún más costos asociados de seguridad social (subsidios por desempleo) en la ya alarmante situación de los sobrecostos en ese sentido. No se entiende hasta cuándo se va a esperar para tomar acciones con la realidad que ya nos golpea la puerta.

La pregunta parece clara: ¿Vamos a quedarnos mirando como se nos cae todo el castillo de naipes en la cara? ¿Esperarán a que ya todo esté roto para tomar acciones?

No lo sabemos, pero ya todo se viene dando a un ritmo muy acelerado y en frente de nuestros ojos… Estamos avisados.