Lo seductor en otra parte: la FIL extramuros
Carlos Rodríguez
La fuerte convocatoria de autores, editores y lectores que llenaron bares, librerías y otros espacios alternos recuerda que el atractivo de la FIL Guadalajara también ocurre fuera de ella.
Mientras Expo Guadalajara, la sede de la Feria internacional del Libro (FIL), se llena de estudiantes de todas las edades –siempre hay un conductor de Uber que confiesa que los maestros obligan a los estudiantes a ir a la feria– que junto al resto de los asistentes crean un caos, bares y librerías se convierten en espacios literarios más estimulantes.
No reclaman etiqueta ni tampoco exclusividad. A las fiestas, cócteles y encuentros prácticamente cualquiera se puede colar –Coca-Cola para todos y algo de comer, cantaba Mecano. Ahí estaba, por ejemplo, Neige Sinno, ganadora de los premios de literatura francesa Femina y el Goncourt de los Estudiantes por Triste Tigre, arrinconada en la barra de arrabal de Pare de sufrir, bar de mezcales en la colonia americana. También estaban los autores mexicanos Roberto Abad y Cristian Lagunas (Premio Mauricio Achar 2022). En Patán Ale House, otra sede alterna, era más fácil hablar, cerveza en mano, con el luxemburgués Jean Portante.
Lo seductor siempre está en otra parte. En la galería House of Gaga, en Santa Teresita, un barrio conocido por albergar artistas como Rubén Méndez, se presentó el evento “Poemas griegos. Lectura reciente de Luis Felipe Fabre”. Ahí el poeta y escritor mexicano, autor de Escribir con caca, leyó “Medusa”, un texto que nace de su relectura de las tragedias griegas. “Dulce Eros de temibles dardos, por quien todo llega a ser, te ofrendo el agujero de mi culo, abismo hacia la alegría que soy cuando no soy”, dijo Fabre a manera de introducción. En Gaga, que recién se mudó de la Ciudad de México a Guadalajara, estaban el editor de Sexto Piso Diego Rabasa, el artista Daniel Guzmán, la actriz Ariane Pellicer y la directora de teatro Ximena Escalante.
En la librería Impronta, también en la americana, ocurrieron múltiples actividades. Por casi cada día de la FIL, en la casa de imprenta, tienda literaria y cafetería, con un gran árbol al centro del patio, se llevaron a cabo fiestas y charlas. Ahí tuvo lugar la mesa “Pequeño panorama de la edición independiente en Argentina” con representantes de los proyectos Gog and Magog, Paisanita, Concreto, Serapis, Hekht y Madreselva. De igual forma se presentaron los libros Atlas de rasgos familiares de Marisol García Walls y Diario de viaje a Italia por Suiza y Alemania (1580-1581) de Montaigne, que recupera la editorial Minerva. Sobre todo, llamó la atención el evento dedicado a El feminismo ya fue de Mikaelah Drullard. Retomando elementos del pensamiento latinoamericano sobre el progreso y el futuro, la escritora travesti dominicana, acompañada por Yásnaya Aguilar, habló sobre la polémica que ha suscitado su libro entre las feministas: “el feminismo blanco ha construido una ficción. Mi cuerpo necesitaba un pie de página para existir. Me cansé de ser un anexo de cualquier movimiento político. Así como dicen que el futuro ya fue, El feminismo ya fue es un libro cimarrón y fugitivo”.
Una más de las sedes favoritas de la otra FIL es Patán Ale House, un bar con terraza que desde el año pasado se convirtió en el espacio favorito para las presentaciones más bien nocturnas. En el marco del programa Liberfilia, dedicado a la edición independiente, la escritora Maira Colín presentó el poemario Nacieron flores de mi boca cuando olvidé tu nombre, editado por Espina Dorsal. Poemas de íntimo calado que se leyeron y escucharon codo a codo con conocidos.
Con todo y su mastodóntica programación, lo más atractivo de la FIL está fuera de ella. Así lo demuestra la enorme convocatoria de autores, editores y especialmente lectores que acapararon los pequeños espacios alternos que catalizan de manera burbujeante los días de la FIL. No solo House of Gaga, Impronta y Patán, también las librerías Elegante Vagancia y Lopa e incluso espacios como el Museo Cabañas y el Museo Regional le dan un realce vivaz y una lectura menos encorsetada al mayor encuentro literario de Hispanoamérica.