Perú, engañado ante el nombramiento de Bellido

Lorenzo Aguirre

El “Foro de Sao Paulo”, y el “Grupo de Puebla” festejaron con bombos y platillos la asunción del electo presidente peruano Pedro Castillo (“Perú Libre”) – ideología marxista, leninista, chavista, cuyo Secretario General es Vladimir Cerrón, quien, desde las sombras, maneja dicho partido, y desde ahora, lo hará de igual forma, en el gobierno -, señalando que, la llegada al poder del dirigente comunista, significa esperanza, dignidad, como también inclusión social no solo del pueblo peruano, sino todos los de América. Sin lugar a dudas nuestro continente está presionado por los siempre activos dinosaurios comunistas, buscando ampliar horizontes imperialistas con un enfoque de “nueva política”, estableciendo pautas concretas en aspectos ideológicos, y posiciones más agresivas en lo económico, como asimismo social, para manejar una conducta “apropiada” a los tiempos que corren, e impulsar, llegado el momento, el espíritu de otrora.

El “Grupo de Puebla”, manifestó: “nuestro compañero comunista Pedro, se suma a los vientos progresistas que soplan sobre la región, los cuales empezaron con la elección de López Obrador, en México, y Alberto Fernández, en Argentina, para continuar con la llegada de Luis Arce, en Bolivia, a lo que debemos sumar la Asamblea Constituyente, en Chile”.

El “Grupo de Puebla” es un foro político fundado en la mencionada localidad mexicana – en julio de dos mil diecinueve – por treinta líderes izquierdistas radicales de América del Sur, Centroamérica, y España, como, Lula da Silva, Dilma Rousseff, Rafael Correa, José Luis Rodríguez Zapatero, el exsecretario de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Manuel Insulza, Evo Morales, Alberto Fernández, el canciller argentino Felipe Solá, José Mujica, y Daniel Martínez, entre otros.

El movimiento, apoya al “Foro de Sao Paulo”, y hace contrapeso al “Grupo de Lima”, el cual surgió en agosto de dos mil diecisiete – integrado por Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Honduras, Paraguay, Panamá, Perú, etc – con el objetivo de buscar una salida pacífica a la crisis de Venezuela, y desde la fecha viene sancionando política y económicamente al gobierno del dictador Nicolás Maduro, como asimismo denunciando violaciones a los derechos humanos.

En lo que respecta al “consular” “Foro de Sao Paulo”, está constituido por agrupaciones de izquierda revolucionarias de América del Sur, fundado en mil novecientos noventa por el “Partido de los Trabajadores de Brasil”, siendo su ideología marxista, leninista, comunista, chavista, peronista…. – “¡una joya”! -, y su objetivo, combatir el neoliberalismo en Latinoamérica, y el Caribe, e imponer un gobierno comunista.

Entre sus miembros, figuran, Lula da Silva, Evo Morales, Rafael Correa, Daniel Ortega, Nicolás Maduro, López Obrador, las organizaciones terroristas “Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia” (“FARC”), “Ejército de Liberación Nacional”, y por supuesto el apocalíptico y patético “Movimiento de Liberación Nacional – Tupamaro”, de nuestro país, conjuntamente con “26 de Marzo”, “Frente Amplio”, “Asamblea Uruguay”, “Vertiente Artiguista”, y todos los escatológicos Partidos Comunistas.  

Por su parte, el presidente boliviano Luis Arce, dijo: “Perú, tiene ya un gobierno del pueblo, y para el pueblo”, majadera frase gastada, obsoleta, representando demagogia, y mentira comunista.

Indudablemente la situación política en América del Sur – también en Centroamérica – es compleja, pues la vernácula izquierda marxista, leninista, está permanentemente dinamitando la región y preparando soportes sólidos hacia el próximo año, de cara a las elecciones en Brasil, buscando que, Lula da Silva, vuelva al sillón aristocrático del Planalto, y se mande una larga siestita en el burgués Alvorada.

Asimismo, en mayo de dos mil veintidós tendremos comicios en Colombia, y según vienen las cosas el ex militante de “M – 19” – organización guerrillera aliada a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, Frente Sandinista de Liberación de Nicaragua, y MLM – T, de Uruguay -, Gustavo Petro, comienza a colocarse en primera posición.

Castillo, designa Primer Ministro

 al radical Guido Bellido

El presidente Pedro Castillo –  manifestó no ser comunista, ni chavista – designó como Primer Ministro – Jefe de Gabinete – al radical marxista leninista Guido Bellido, quien señalara: “Cuba, no es una dictadura, y Sendero Luminoso tampoco es terrorista”.

Bellido, es mano derecha – ¡deberíamos decir mano izquierda! – de Vladimir Cerrón – fundador de “Perú Libre”, servil reptando frente a Cuba, y al Partido Comunista ruso -, defendiéndolo cuando este fuera inhabilitado y condenado a casi cuatro años de cárcel por “negociaciones incompatibles y abuso en el cargo”, siendo gobernador de Junín.

El pueblo quedó sacudido con el nombramiento de Bellido, y ahora manifiesta haber sido engañado porque dicha designación es hacia una persona totalmente machista, condenado por corrupción, y encontrándose bajo investigación por apología del terrorismo al defender y justificar los asesinatos de Sendero Luminoso.

Los peruanos, ahora dicen que, el gobierno, no puede tener a Bellido – ¡pero ya es tarde! – pues, es antilimeño de conocida trayectoria, y comprometido con el marxismo – leninismo, mientras la comunidad “LGTBI” lo califica de homofóbico…- ¿qué dicen los “progresista” uruguayos perteneciente a la misma comunidad? -, y el “Movimiento Homosexual de Lima” manifiesta que, Pedro Castillo, ignoró a las comunidades al elegir a un “fanático”, como Primer Ministro.

¿Camino al cierre del Parlamento?

A decir verdad, parece mentira que, el pueblo peruano tuviera tan cerrados los ojos, pero, ahora, no solo se da cuenta hacia dónde va la ideología del nuevo gobierno, sino, además, está viendo con claridad que, Castillo, es un peón de Vladimir Cerrón.

Gran parte de los ciudadanos están preguntándose, ¿hacia dónde iremos a parar?, como también ya se escucha la frase, “¡nos vendieron una imagen de un “candidato moderado”, pero hemos sido engañados!”.

El siniestro Primer Ministro, Guido Bellido, tendrá plazo de un mes para conquistar el voto de confianza del Congreso, pero para ser aprobado necesita una mayoría simple, y “Perú Libre” tiene solamente treinta y siete asientos, de ciento treinta del Congreso.

Ud, ¿piensa que no ganará?

¿Si por esas “casualidades”, sin “darse cuenta”, Bellido provoca al Congreso, buscando no ser apoyado?…

¡Quizá, al sentirse no mimado, cierra el Parlamento, y gobierna por decretazos…!