El primer paso en el camino de la creación de la universidad virtual en el Uruguay

Claudio Rama

La semana pasada se presentó ante el Parlamento para su consideración por parte del diputado Felipe Schipani y con apoyo de la bancada de diputados del Partido Colorado, un anteproyecto de Ley de creación de una Universidad Virtual del Uruguay.

Foto: Departamento de Fotografía del Parlamento del Uruguay

Me toco el honor de contribuir a formular un borrador de propuesta de un tema que he estudiado y promovido por más de 25 años. En la semana también se realizó la presentación pública de esta iniciativa en un evento realizado en el propio Parlamento, con asistencia de muchos diputados firmantes así como de otros partidos, junto a múltiples actores nacionales y personas especialmente interesadas.

Entre ellos por ejemplo el Ministro de Educación y Cultura, Pablo Da Silveira que me transmitió su mirada positiva a esta iniciativa así como el Presidente de ANTEL, Ing. Gabriel Gurmendez que me refirió que tenía algunas observaciones previamente y que la presentación y las respuestas a las preguntas le permitieron tener una perspectiva distinta y positiva del proyecto.

Es este sentido es imprescindible realizar encuentros para que la gente pueda ver el tema con más amplitud y conocimiento. Hace mil años que vivimos en un modelo de enseñanza de tipo presencial, de tiza, lengua y pizarrón, que marco todas las experiencias personales de enseñanza y que creó una mirada limitada. Es lógico que exista mucho desconocimiento.

La pandemia ayudo a mirar las oportunidades de enseñar con la virtualidad, aunque esa era fue una educación de emergencia organizada en forma paliativa y remedial, y que la educación virtual es una modalidad muy superior de organización pedagógica. Con la presentación formal del proyecto se inició el camino tanto de conseguir apoyos de la ciudadanía si cree que esto será positivo para sus vidas, así como de todos los partidos políticos. Igualmente de aclarar dudas y de realizar aportes al proyecto.

En lo social hemos promovido una iniciativa en Change.org para apoyar la creación de la Universidad Virtual que los invito a apoyar y a difundir. https://chng.it/NN895f5C .

En lo institucional esperamos en próximas semanas que los partidos y sus representantes puedan dar su apoyo. El viernes mismo en Durazno tuve ocasión de conversar con el Presidente de la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados, Miguel Irrazabal, que había estado en la presentación del proyecto en el Parlamento y que me manifestó su apoyo entusiasta a una iniciativa que busca que las personas del interior, pero también del cinturón de Montevideo.

El Proyecto se propone como una universidad pública. Concibe que el carácter especializado de la modalidad requiera una institucionalidad diferenciada, tal como ocurre a escala global, donde las organizaciones se especializan en algunas áreas. La propuesta espera beneficiar a todas las personas que quieran estudiar estudios terciarios y universitarios de calidad, de grado, en forma gratuita y de posgrados a través de tecnologías de información y comunicación digitales. Se concibe pedagógicamente a partir de una enseñanza sincrónica y asincrónica apoyada en plataformas, tutores, recursos de aprendizaje simuladores, streaming y apoyo de inteligencia artificial y de chatbots para apoyar y dar seguimiento y que permitirá que miles de uruguayos puedan acceder a sus deseos de estudiar.

Permitirá reconocer créditos y cursos que no se han podido continuar realizados en otras universidades a efectos de poder proseguir los estudios y obtener una titulación superior. Su acceso será abierto pero todos deberán realizar exámenes de egreso. Aunque su modelo es virtual, también podrá haber actividades prácticas, descentralizada en ámbitos públicos y privados y cerca de las residencias de los estudiantes, cuando no existan simuladores en red o que estos no crean todas las competencias.

Sin duda la creación de una enseñanza pública especializada y focalizada en esta modalidad beneficiará a personas del interior del país, con movilidad permanente o momentánea limitada, y así dedicarse a estudiar en sus propios tiempos y posibilidades con flexibilidad. Permitirá cumplir el derecho a la educación como derecho a elegir y a beneficiarse de las tecnologías y de la enorme infraestructura de conectividad que se ha invertido en el país y con poco uso.

La propuesta ha sido muy bien acogida en las pocas presentaciones que se han realizado en los medios de comunicación por personas que han llamado. Pero también hemos escuchado “con la educación virtual se me vacían las aulas”; “sobran profesionales que trabajan de taxistas”, “eso lo puede hacer la dos universidades existentes”.

Responderemos ampliamente. Solo digamos por ahora que la enseñanza deber tener como centro a los estudiantes y no a las instituciones o funcionarios, que el país Uruguay es de los que tienen menos egreso de profesionales de Latinoamérica y que no se debe limitar el derecho a estudiar y elegir la pedagogía, y que no se está contra ninguna institución sino para ayudar a diversificar el acceso, ya que cada una tiene sus tradiciones y concepciones que le es imposible cambiar sin dejar de ser lo que son.