Colorados y batllistas votamos a la coalición republicana

Daniel Manduré

El Frente Amplio no tiene programa, ellos mismos lo dicen. Tienen algo a lo que llaman “Bases Programáticas” que no pasan de ser simples enunciados voluntaristas sin sustento económico-financiero. Dicen lo que se supone van a hacer sin aclarar cómo, ni de donde sacaran el dinero para hacerlo. Titulares sueltos, más como ejercicio marketinero con mucho de demagógico y populista y poco de propuesta seria y realizable. Van de contradicción en contradicción, cuando el principal referente de la aplastante fuerza mayoritaria, el tupamaro Pacha Sánchez dice algo, al rato, su candidato a ministro de economía Gabriel Oddone sale a decir lo contrario. Horas más tarde Fernando Pereira brinda una tercer versión. El Pit Cnt con su fuerza dominante, tironea y marca la cancha con una cuarta postura. Por si fuera poco, quien pretende presidir el país Yamandù Orsi, dice no saber de qué están hablando y cuando parece iluminarse y pretende responder…no se le entiende lo que dice.

Si ganara el Frente Amplio ¿quién va a guiar con firmeza el timón del barco y su política económica? ¿El confundido candidato Orsi, el propuesto, pero también resistido ministro de economía Oddone, el Pit Cnt con el Partido Comunista o el principal referente de la fuerza mayoritaria el tupamaro Pacha Sánchez? Ni ellos lo saben con certeza. Lo cierto y lo real es que hoy el radicalismo maneja los hilos de esa fuerza política.

Si llegaran a ganar, figurarían unos y mandarìan otros.

Por todos estos líos internos, marchas y contramarchas, convocan al veterano guerrero, le piden que salga de la tatucera y que intente sacarles las castañas del fuego. Aparece entonces en forma activa, la renovación del Frente Amplio, José Mujica. Por supuesto que sale, con su acostumbrada impunidad, a decir una serie de disparates y barbaridades.

Me recuerda a la fábula del francés Jean de la Fontaine, “del mono y el gato” donde ambos observan como el vecino asaba en su casa castañas. El mono empuja al gato para que robe esas castañas y las saque del fuego. A medida que el gato las va sacando y de quemarse al hacerlo, el mono se las va comiendo. Uno hace el trabajo que los demás no se animan a hacer. Llevado esto al terreno político le piden al veterano dirigente que haga ese trabajo que ellos son incapaces de hacer.

Están desesperados, los invade el nerviosismo, todo sirve, todo vale, de otra manera no se entiende como intentan mostrar a individuos, que, comprados, se pasan de un partido a otro. Porque eso es lo que están haciendo, comprando voluntades, con el ofrecimiento de cargos. Lo muestran como los grandes pases, cuando apenas valen un voto. La condena ética de quienes por un cargo dejan en la vera del camino sus principios, si es que alguna vez los tuvieron. Y la fuerte condena de quienes no pueden convencer con argumentos y van comprando votos. Ambas cosas repudiables. Ya hay en la Intendencia de Canelones, con Orsi antecedentes de este tipo.

Si alguna duda había, lo confirma la denuncia pública realizada por el diputado de Cabildo Abierto Martin Sodano, quien con nombre y apellido acusa a dos referentes del MPP la diputada Cecilia Cairo y al jefe de campaña de Orsi, al senador Pacha Sánchez sobre el concreto ofrecimiento de cargos si su grupo acompañaba la candidatura de Orsi. Ofrecimiento de cargos que podía extenderse incluso en un eventual futuro gobierno departamental.

Los ciudadanos, el próximo domingo, cuando estemos frene a la urna no podemos olvidar todas estas cosas, que en 15 años no lograron realizar la tan necesaria transformación educativa. Dejaron sumergido al país en una decadencia de valores. Con un desastre en materia de seguridad pública, los peores números de la historia. Incapaces de poder lograr la reforma de la seguridad social. Dejaron  una economía estancada y con los más altos cargos de gobierno condenados por corrupción.  Ministros, presidentes de bancos, diputados, directores de entes y hasta un vicepresidente de la república fueron condenados por la justicia. Los mismos que fundieron entes monopólicos y despilfarraron nuestros dineros en fracasados proyectos. Los mismos que hoy encabezando la formula presidencial tienen a Canelones y Montevideo sumergidos  en la mugre.

Somos diferentes a los blancos y lo vamos a seguir siendo. Hemos tenido con ellos momentos en la historia de fuertes diferencias, algunas que persistieron en el tiempo, de luchas encarnizadas en los campos batalla, pero también momentos de encuentros, reconciliación  y acuerdos.

Nos unen hoy, muchas coincidencias programáticas con los partido integrantes de la coalición, en un momento diferente de la historia. Los partidos hoy no son lo mismo que hace 100 o 150 años, el país no es el mismo. Son diferentes sus problemas y las prioridades de sus ciudadanos. Las principales naciones de Europa para poder gobernar, hace décadas, que lo hacen a través de coaliciones con quienes tiene mayores coincidencias.

Nadie pierde su identidad ni deja de lado sus principios. A todos nos unen esa mirada republicana que está por encima de todo.  

Todos los que votamos a Andrés Ojeda en esta última elección, todos, sabíamos su profundo espíritu  coalicionista. No hay sorpresas.

Vamos a votar todos con convicción a Álvaro Delgado, no como nacionalista que es, sino como integrante de una coalición republicana, de la cual nuestro partido colorado es parte importante de la misma.

Mientras algunos se desesperan en ver como un viejo veterano les saca las castañas del fuego, la coalición republicana se prepara para gobernar.

Mientras unos piensan en el pasado, la coalición republicana solo piensa en el porvenir.

Mientras a unos los invade un rancio dogmatismo, la coalición republicana solo piensa en libertad.

Mientras al Frente Amplio los dominan los extremos la coalición republicana sabe que las soluciones siempre están en la negociación y el dialogo y eso se logra siempre por el camino del medio, del centro.

Por todo esto y mucho más los colorados y batllistas votaremos a Álvaro Delgado.