Receta colorada
Romper los vínculos criminales
Zósimo Nogueira
Mayor visibilidad policial, generando vínculos y confianza con la comunidad.
Intensificación y permanencia de patrullaje, rapidez de respuesta a las demandas de auxilio.
Programas de alerta, verificaciones y desplazamientos seguros en zonas poco conocidas. Tecnología actualizada.
Para bajar los homicidios debemos debilitar a las organizaciones criminales.
No es una novedad, ni un fenómeno exclusivo de nuestro país; interacción del crimen organizado con las cárceles.
Los conflictos entre bandas, clanes o familias criminales de afuera se repiten en el interior de las prisiones.
Es tal la fluidez en materia de comunicación que lo que ocurre en un lado a poco rato se sabe en el otro.
Esto desencadena una sucesión de órdenes y decisiones imposibles de neutralizar. Toma de decisiones en tiempo presente.
El vínculo interno-externo es esencial para el manejo del crimen organizado.
Permite saber de procedimientos, detenciones, traiciones, fuga de información, agresiones y muertes casi que al momento.
Permite minimizar perjuicios, neutralizar; abrir y cerrar puertas.
Están los habituales medios y fuentes de información, teléfonos celulares, informativos, visitas y hasta custodios y operadores del Estado.
Y los ingresos que se incorporan a los grupos dominantes. Ese tema da para largo.
Las autoridades, los profesionales y los guardias ven la superficie. Es un trabajo insalubre y peligroso. La vista gorda es un método de sobrevivencia.
A quienes dirigen el poder paralelo no les convienen cambios que afecten sus negocios, conexiones y poder de negociación.
La calma del dominio.
En este mundo real, si se realiza una gran requisa en una cárcel.
Al día siguiente ya habrá nuevos cortes y en poco tiempo todo vuelve al estado anterior. Son la protección y el freno al enemigo
Todo se logra en base a información y a la movilidad de quienes trabajan en mantenimiento, talleres y pueden conectarse con otros sectores
Esto funciona por miedo, amenazas, intercambios, retribuciones, premios, protección etc. Capos visibles y capos solapados.
Para debilitar a las organizaciones criminales debemos cortar vínculos, dificultar remplazos y continuidad de la actividad criminal.
Para eso considero necesario la inmediata construcción de tres cárceles distante de los actuales establecimientos.
Esa es imprescindible, más plazas en el mismo ámbito es un nuevo fracaso.
De alta seguridad, con capacidad no superior a 500 plazas.
Sólidas, celdas individuales con gabinete higiénico, espacios de recreación compartimentados, inhibidores de señales que eviten comunicaciones, cabinas de guardia y observación de espacios comunes, toda la tecnología necesaria etc.
Personal de seguridad preparado y bien pertrechado.
Atención profesional en espacios seguros. Sin presiones. Abogados, médicos, asistentes sociales, sicólogos, pedagogos etc.
No se trata de más gastos, ni más comodidades para los presos, es una inversión a la que le sacaremos mucho rédito.
Prioridades bien definidas. Reclusión segura.
Cumplimiento de la pena, protección de vida e integridad física, libertad de conciencia, asistencia jurídica sobre su causa, atención sanitaria, ayuda pedagógica, alimentación.
Uno de estos establecimientos destinado a los “capos” que ejercen liderazgo en las diversas cárceles.
Alojados con la debida compartimentación. Trato igualitario.
Aislados. Los líderes sin su tropa carecen de fuerza, están solos.
Son absolutamente dependientes del sistema y de la autoridad.
Están limitados a sus propios medios.
Sin comunicación con el exterior no pueden impartir directivas, ni estar al tanto de lo que ocurre en su propia organización; están muy limitados en sus decisiones.
Esto evita o retarda decisiones drásticas de ajustes de cuentas; menos balaceras, menos muertes.
Se debilita al poder paralelo lo que permite recuperar o mejorar el control de las otras cárceles.
Sin presiones, haciendo retrospección; tanto los capos como los presos comunes pueden realizar un examen de conciencia y ver caminos que lo alejen del delito.
Las otras dos cárceles de construcción similar; para alojamientos en solitario destinadas a los ingresos.
Esto permite hacer cumplir condenas, proteger y protegerse de agresiones y libertad de conciencia.
Opción de cambio sin necesidad de integrarse a las bandas para protegerse de extorsiones, amenazas y golpizas, pago de peajes, etc.
De adquirir conocimientos y habilidades para una actividad lícita al egresar. O simplemente cultivarse y cumplir pacíficamente su condena.
Esto baja la reincidencia y mejora en la salud de la población carcelaria. Tratamientos a adicciones, “desprogramando”
Luego vendrá una segunda etapa de reestructuración
En las otras cárceles habrá menos hacinamiento, liberando espacios para sanciones, seguridad, incomunicar investigados, aislar enfermos. *
Construcción o adecuación de edificios para dar protección y alojamiento inmediato a quienes denuncien violencia doméstica o de género.
Reducir mortalidad en casos de violencia doméstica o de género.
Protección adecuada en tiempo y forma.
Damos crédito a expresiones de la pre-candidata Presidencial Carolina Cosse. El 60% de los Femicidios carecen de denuncia previa. La demora en la denuncia es múlti-causal.
Una de éstas, es cuando la víctima carece de un lugar para refugiarse y sentirse protegida.
Ni puede abandonar su hogar, ni obligar a que lo haga su agresor
Su defensa es la discusión o la mutua agresión, con la habitual desventaja de su menor contextura física, fortaleza y habilidades de lucha.
En muchos casos con menores a cargo y falta de capacidad de sustento.
Eso retarda su decisión de denunciar y sabe que de no contar con protección inmediata la violencia será mayor.
La falta de recursos que tienen las Seccionales desalienta pedidos de ayuda.
Lleva tiempo disponer un servicio de esta naturaleza y para escenarios muy diversos.
Se necesitan lugares de albergue inmediato.
Proponemos adecuar edificios para alojar a estas personas.
Edificios testeados, con custodia policial permanente. Orientación profesional de las familias allí alojadas, mientras se localiza, detiene al agresor y se judicializa la causa.
Con esto logramos un abordaje profesional, seguridad, dignidad y comodidades imprescindibles para custodias y custodiados.
Se reduce sensiblemente el número de custodias, personal que puede destinarse a las tareas habituales de la policía.
Haciendo números se generan economías y no sobrecostos como es lógico suponer.
Con esto se minimizan las posibilidades de agresión y muerte.
Se orienta a las personas sobre sus derechos, deberes y las protecciones de que dispone. Se profesionaliza el abordaje de tan grave problema.
Ciertamente que hay homicidios que solo podrá evitarlo el propio destinatario de la agresión, los conflictos circunstanciales por lo general son de resultado incierto e impredecible.
Pero con estas propuestas se bajara el número de muertes por conflictos criminales y por la violencia irracional doméstica y de género.
Menos muertes y lesiones dentro y fuera de las cárceles, mayor control del Estado.
Menos balaceras, heridos y muertes. Menos reincidencia.
Menos angustia y mayor seguridad en temas domésticos.
Menos tráfico, bocas, consumo, más tratamiento en adicciones.
Hay que invertir en seguridad y calidad de vida de la comunidad. Una solución. Una propuesta colorada.
*Aquí la prioridad no es el trabajo, si desarrollar habilidades para el egreso. Habilidades para emprendimientos individuales.
Ya que no pueden competir en la oferta laboral con personas de probada buena conducta.
Cuando se habla de trabajo para presos no se dice que la mayoría posee habilidades y experiencias laborales, solo que eligieron otro camino.
Que la ley no permite el trabajo obligatorio, y que en las cárceles realizan tareas de escasa demanda externa.
