Unidos y renovados, a conquistar el porvenir.
Daniel Manduré
Día histórico el del sábado, en la Convención Nacional del Partido Colorado. Verdaderamente histórico. Los convencionales electos. producto de una elección interna, debíamos ratificar la fórmula presidencial que le presentaremos a la ciudadanía en las próximas elecciones nacionales de octubre. Momentos de fuertes emociones, reencuentros, alegría, abrazos interminables y la potente calidez transmitida en cada apretón de manos. Hombres y mujeres que arribábamos con la ilusión renovada a una casa que nos esperaba vestida de gala. Como en sus mejores tiempos. Hacía tiempo que no se vivía ese clima, una vibra positiva inundaba el ambiente.
En la puerta, parado al pie del cañón, como ha estado siempre y saludando uno a uno a los más de 400 convencionales Andrés Ojeda, quien unas horas después con Robert Silva, pasarían a ser oficial y formalmente nuestra fórmula presidencial. Una gran fórmula.
Una pieza oratoria, como siempre brillante, del dos veces presidente Sanguinetti que abrìa el fuego, el gran trabajo del prosecretario Gustavo Osta y de toda la comisión electoral, como puntos a destacar.
La elección interna, no había dejado heridos. Todos sabían que hay principios y valores superiores que preservar que están por encima de un resultado electoral. Sin rispideces, con madurez política y con gestos de desprendimiento en pocos días quienes habían disputado la interna ya se habían puesto de acuerdo en una fórmula. El primero encabezaba, el segundo sería su compañero y el resto acompañaba. Así fue, a diferencia de la polvareda que se pudo percibir en la elección de la fórmula desde otras tiendas partidarias.
Llegamos a esta Convención Nacional con un partido consolidando, en un crecimiento continuo. El único que crece a diferencia del resto, algunos estancados electoralmente y otros decreciendo.
Llegamos con un gran candidato presidencial, que viene sin mochilas pasadas muy bien parado en el presente a conquistar el porvenir. Que, a su juventud, capacidad, solvencia, claridad conceptual y su permanente contacto con la gente, le suma un gran equipo, con hombres y mujeres con un gran conocimiento del estado. El mejor candidato y equipo para ofrecerle a la república
Llegamos a esa convención con una gran formula. La mejor de todas, donde ambos se complementan a la perfección. Sin dudas Robert Silva es un gran compañero de fórmula.
Llegamos unidos, si, en unidad, que no significa unanimidad. Unidad en la diversidad, unidad en el respeto al que piensa diferente. Diversidad y diferencias de opinión, que contrariamente a lo que algunos piensan enriquecen, nutren y potencian la vida interna de los partidos políticos.
Llegamos, habiendo concretado la tan ansiada renovación, la que todos y el propio partido reclamaba a gritos. Una renovación natural, auténtica. Liderada por Andrés Ojeda que ha interpretado al pie de la letra estos nuevos tiempos.
Y vamos a llegar a las elecciones de octubre con el mejor programa de gobierno. Una nueva forma de ver y de hacer política, moderna, dinámica, pragmática y aggiornada a estos nuevos tiempos, pero sostenida por los valores y principios que históricamente caracterizaron a nuestro partido. Será un programa liberal, republicano, laico, tolerante, profundamente humanista y con un gran contenido social. Que se presentará ante la opinión pública, como lo anunciará nuestro candidato, el próximo 29 de agosto y a través de un contrato con la ciudadanía.
Es el tiempo del Partido Colorado, no se puede retroceder, no queremos volver a los 15 años nefastos del Frente Amplio.
El Partido Nacional encabezando hasta ahora, la coalición de gobierno ha tenido logros importantes. Atravesó y se repuso a varias crisis durísimas, entre ellas, el covid y la sequía. Aciertos en lo económico y en lo social que hay que destacar. Fuimos los colorados socios leales, no obsecuentes. En materia de seguridad se avanza, los números lo demuestran con claridad, pero ha sido insuficiente. Seguro que en eso estamos todos de acuerdo. Muchos temas pendientes. Queda mucho por hacer.
Hoy es tiempo del Partido Colorado. Es tiempo de Andrés Ojeda.
Más allá de los naturales y lógicos reacomodamientos y movimientos internos, pero que no suman, todos los sectores del partido debemos buscar estrategias para continuar creciendo para afuera de las fronteras partidarias. Pescar por fuera de la pecera. Pensando no en una banca ni en posiciones personales sino en el crecimiento de la colectividad. El discurso de Andrés Ojeda ha ido siempre en esa dirección y en el debemos apoyarnos.
La coalición republicana ha estado unida, con todos los tropiezos naturales de algo nuevo. Queremos más y mejor coalición republicana. Intentando que ese sueño que hasta hace poco tiempo parecía imposible concretar se pueda transformar en una hermosa realidad. Que vuelva a ganar en noviembre la coalición republicana y que el partido Colorado la encabece, con Andrés Ojeda como su punta de lanza, como su legítimo líder
Hacia allí vamos con fe y optimismo. ¡Ojo con Ojeda!