Noticias

“El gran golpe” del PIT-CNT

Modesto J. Llantada Fabini

El Frente Amplio está sufriendo un golpe de estado “a la uruguaya”. En decir en forma progresiva, subrepticia, “en cámara lenta”.

Luego de la derrota de Octubre 2019, y su ratificación en Noviembre, el Frente Amplio quedó desconcertado. Solo atinó, antes de entregar el Poder Ejecutivo, a una serie de chapuzas malintencionadas, para agregar nuevos explosivos al “campo minado” que dejaba como legado de sus quince años de gobierno con poder absoluto.

A los quince días de asumir el nuevo gobierno, llegó la pandemia de COVID, celebrada “in péctore” por el frentismo con una ofensiva política y seudo-científica promoviendo la “cuarentena total obligatoria”, que fue resistida con firmeza y buenas razones, para mantener los motores de la economía funcionando, y apelando a un concepto incomprensible para los autoritarismos mesiánicos: una convocatoria a la “LIBERTAD RESPONSABLE”.

Manifestaciones, aglomeraciones, situaciones linderas a la figura penal de “motín y asonada”, que se reflejaron puntualmente (15 días después) en abruptos saltos de la gráfica de contagios, fue la respuesta frenteamplista.

Luego siguió denunciar la demora en la vacunación, con el Sindicato Médico, (desde la insolvencia), reclamando créditos para comprar la vacuna “Sputnik”, en la que se embarcó Argentina, para, 100.000 fallecidos después, terminar hocicando con “Pfitzer”.

Es verdad que Uruguay tuvo demoras en comenzar la vacunación, pero terminó primero, y que los actuales casos de COVID, son en buena parte consecuencia de fundamentalistas anti vacuna, que sin embargo tienen sus hijos vacunados con la triple viral, y contra la poliomielitis y el tétanos….

Pero nos fuimos del tema. En medio del desconcierto de la dirigencia frentista, y frente a un gobierno de coalición que, en legítimo uso de sus holgadas mayorías parlamentarias, marchaba exitosamente con rumbo firme y desmantelaba los abusos legales pero ilegítimos del anterior gobierno; el PIT CNT, (que ya había probado su fuerza haciendo recular a Mujica y a Vázquez), viendo peligrar sus privilegios, resolvió hacerse cargo de la situación.

Observando la desesperación desordenada del Frente Amplio y sus autoridades, resolvieron usar el mecanismo del referéndum contra la Ley de Urgente Consideración, que los priva del poder “de facto” en la enseñanza, del patoterismo de las ocupaciones, y de los recursos cuantiosos del descuento automático de las cuotas sindicales vía la bancarización obligatoria.

El Frente Amplio parlamentario trató de resistir, pero como en las anteriores oportunidades, le torcieron el brazo, y el referéndum se puso en marcha.

El desastre del tramo inicial de la recolección de firmas, dio la pauta final de la debilidad de convocatoria y movilización de la dirigencia tradicional frentista, y allí el PIT CNT puso en marcha su militancia para asegurar las firmas y el referéndum.

Pero claro, luego de constatar que el verdadero poder lo tenían ellos, el PIT CNT resolvió lo que ocurre siempre cuando la autoridad es débil y los aspirantes son fuertes; llevaron el asunto a más, y así Fernando Pereira es HOY Presidente del Frente Amplio, mientras Abdala queda a cargo de la central sindical.

La situación es verificable, la izquierda uruguaya, que cuenta con excelentes publicistas, fue desplazada de la dirección de la campaña por un extravagante publicista argentino “K”, cuya escandalosa campaña disparatada y mentirosa, marca un record de ignorancia del funcionamiento de la mente uruguaya.

La elección interna del Frente Amplio, también marca una agitación importante a nivel de los distintos partidos que conforman la coalición de las izquierdas, que se enfrentan a la candidatura presidencial del PIT CNT, (bendecida por el dupla PC+MLN), con candidatos múltiples y débiles.  

Como todo proceso en “cámara lenta”, habrá aceleraciones, altos y retrocesos, pero la dirección básica es poco probable que cambie. Los grandes líderes de la Coalición de las Izquierdas, están muy viejos o difuntos, y los dirigentes que proliferaron durante su vigencia, tienen el raquitismo propio de los “plantines” que quedan a la sombra de los ombúes.

A ello se añade que las ideas radicales de la dirigencia del PIT CNT, están mucho más cercanas a las de Lenín y Trosky; su organización y militancia ya demostró su vigor, y solo resta analizar, (cosa que no es sencilla), el resultado de las seis elecciones simultáneas del último domingo para medir las dimensiones del proceso.

La nueva “troika” mayoritaria conformada por el MPP, el Partido Comunista y el PIT-CNT, (que está simultáneamente dentro y fuera de la Coalición de la Izquierdas), con su rigidez ideológica y su dureza de método y discurso, deja muy poco espacio para los sectores moderados, que han sido el factor de equilibrio del Frente Amplio.

El éxito del sistema republicano democrático, dependen del buen funcionamiento de los Partidos Políticos que lo integran. Cuando un nuevo poder se establece en una de las principales coaliciones del sistema; enfatizando en los ejercicios de democracia directa para desconocer la representación parlamentaria; poniendo énfasis en la “lucha Social” como parte de su propuesta de acción, (que ya está a la vista en la escalada de paros “estratégicos” golpeando las exportaciones), no son buenas noticias ni para los moderados de la Coalición de las Izquierdas, ni para el resto del sistema político y el país.

Compartir

Deja una respuesta