cronicas parlamentarias

¿Hay bienestar animal?

Los integrantes del Instituto Nacional de Bienestar Animal, ámbito controversial para los gobiernos de cualquier signo político, comparecieron ante el Parlamento para hacer una evaluación de su gestión. Por el Consejo Directivo Honorario del Instituto Nacional de Bienestar. Por el Consejo Directivo Honorario del Instituto concurrieron la ingeniera Marcia del Campo, Presidente y representante del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca; Crio. Mayor Williard González, representante del Ministerio del Interior; doctora Nadia Crosigniani, representante de la Facultad de Veterinaria; doctor Javier Román, representante de la Sociedad de Medicina Veterinaria del Uruguay; señor Juan Antonio Rodríguez, en representación de productores rurales; señora Adriana Caballero, representante de organizaciones protectoras de animales; profesora Rita Rodríguez, representante alterna de organizaciones protectoras de animales; señora Marcela Delgado, Directora Ejecutiva del Instituto Nacional de Bienestar Animal, y doctora Alejandra Pacífico, asesora legal.

SEÑORA DEL CAMPO (Marcia).- Muchas gracias por la invitación. Estamos muy contentos. Nos gustó mucho la propuesta de hacer una evaluación sobre lo que fue el año y los objetivos a mediano y largo plazo, más que nada focalizando en el cierre del año. Como esa fue la propuesta y como hemos recibido una cantidad de pedidos de informes por parte de los legisladores, para hacer mejor uso del tiempo, resolvimos hacer una presentación que contempla gran parte de la información que han solicitado. Por supuesto, después también haremos llegar las respuestas. Vamos a hacer una breve recordación del Instituto y de su creación, y sobre esa base vamos a expresar cuál fue la estrategia que nos planteamos cuando se creó, que contempla objetivos y metas de corto, mediano y largo plazo. Luego, vamos a compartir lo que pudimos cumplir en este año y medio de trabajo, así como también los objetivos de mediano y largo plazo. El Instituto fue creado con el acuerdo de todos los partidos políticos, a partir de la ley Nº 19.889. Somos un organismo desconcentrado dentro del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca. Esto significa que en el Consejo Directivo, que es el órgano que dirige al Instituto, están representados públicos y privados. Estamos presentes aquí todas las instituciones que integran el Consejo Directivo, menos el representante del Ministerio de Salud Pública de la Comisión de Zoonosis, porque la persona que lo representaba se jubiló y aún no han designado a otro. A continuación, los voy a nombrar para que los conozcan a todos. A mí me toca representar al Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca y presidir este Consejo; el comisario mayor, Williard González, representa al Ministerio del Interior y, además, es el director de la Comisión Nacional de Seguridad Rural; el señor Miguel Píriz, representa al Congreso de Intendentes, pero hoy por motivos de salud no nos pudo acompañar; la doctora Nadia Crosigniani, de la Facultad de Veterinaria -también pusimos al suplente porque suelen asistir a las reuniones con los titulares-; el doctor Javier Román representa a la Sociedad de Medicina Veterinaria del Uruguay; el señor Juan Antonio Rodríguez representa a la Agremiación de Productores Rurales, y las señoras Adriana Caballero y Rita Rodríguez representan a las Protectoras de Animales. Nos parece muy importante presentar a los integrantes del Consejo Directivo. Cuando se crea el Instituto se define que el órgano que lo va a dirigir va a estar representado por esta cantidad de instituciones. Ustedes se imaginarán que en este Consejo Directivo tenemos perspectivas muy diferentes de los problemas e, incluso, de los caminos que hay que recorrer para llegar a una solución con la que quizás coincidamos. En lo personal -y creo que estamos todos de acuerdo-, uno de los logros más grandes durante este año y medio que llevamos es tener un Consejo Directivo sólido, muy bien representado, que sesiona semanalmente todos los lunes en forma ininterrumpida durante toda la mañana y muchas veces durante gran parte de la tarde. Lo destaco porque nos parece que fue una decisión muy sabia por parte de todos ustedes sentar en la misma mesa a todos estos actores que realmente tienen intereses y posiciones muy diferentes. Como ustedes saben, el bienestar animal se define como una política país, una política pública para construir lo que es la marca país. Lo que se plantea esta Administración es cumplir con estándares aceptables de bienestar animal en todas las especies y actividades. Además, dada la importancia económica que tiene la producción animal y el agro en nuestro país, nuestra intención es dar garantías en los procesos y productos y lograr la diferenciación; también acercar los procesos de certificación, apuntando a los mercados. Este es un breve resumen; está todo en la página web. Nos parecía importante resaltar que nuestra función primordial, además de cumplir con una cantidad de tareas, es asesorar al Poder Ejecutivo en lo que tiene que ver con las políticas de bienestar animal. Lo destaco porque somos un órgano desconcentrado, pero que está dentro del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca. Muchas veces y en muchos temas se llega a una posición que se traslada al Poder Ejecutivo; el Poder Ejecutivo la toma, pero la decisión es política. Es un poco lo que queríamos aclarar. Nosotros no tomamos decisiones políticas. Está claro; todos lo saben. Somos un órgano asesor del Poder Ejecutivo. En lo que tiene que ver con la estrategia, a fines de 2020 e inicios de 2021, cuando ya era una realidad la creación de este Instituto, se empieza a pensar, entre otras cosas, en la forma de financiación. Ahí empezamos a diseñar una estrategia para conseguir financiación interna y externa. Ese fue el desafío: diseñar una estrategia que asegure estándares aceptables de bienestar animal en todas las especies y actividades en las que el ser humano pueda tener alguna injerencia. En ese momento, iniciando el 2021, nos planteamos dos objetivos fundamentales. Uno de ellos es asegurar el cumplimiento de estándares aceptables de bienestar animal en todas las especies y actividades; otra vez retomo el concepto de país ganadero, país agropecuario, país exportador; tengamos en cuenta que el 75 % de las exportaciones vienen del agro. También es muy importante que podamos asegurar que trabajamos de forma ética y, además, nos interesa fortalecer y proyectar la imagen de país ético. Uruguay está muy bien visto en los mercados internacionales. Estamos convencidos de que es una forma de mostrar transparencia trabajar en este tema, todos en la misma mesa. En cuanto a los objetivos específicos, cuando uno escribe un proyecto siempre tiene que establecer alguna línea de base, algún diagnóstico de cómo está la situación en el momento que empieza. Uno de los objetivos específicos es ver dónde estamos parados en las diferentes actividades para poder diseñar planes a medida. Por supuesto que los diagnósticos no son proyectos de investigación que van a durar cinco años; hay que ir avanzando y dando pasos mientras vamos tratando de relevar la situación en las diferentes actividades. Uno de los objetivos importantes es diseñar o contribuir al diseño de políticas públicas que consideren el bienestar animal. Esos son los principales objetivos específicos que nos trazamos.

Compartir

Deja una respuesta