Políticas de seguridad y cárceles
Zósimo Nogueira
Fuera de la mala administración de los recursos del estado por parte del FA la causa determinante del cambio fue la inseguridad y la inoperancia policial con la vigencia del nuevo código de proceso penal.
El Dr. Jorge Larrañaga con su arenga motivadora impregno a la policía de institucionalidad y con mucha movilidad se abandero de la misión.
Los cambios introducidos en la LUC referente a las potestades del policía la empoderaron y dignificaron su misión al sancionar conductas irrespetuosas y desobediencia.
Hubo acercamientos entre fiscales y policías; mejoras en el esclarecimiento de los delitos, aunque vemos mucho uso de tecnologías y poco del ingenio del investigador.
El Ministro Heber tomo la misión con compromiso y entusiasmo.
Como político es receptor de las demandas ciudadanas pero desconoce las peculiaridades de la función policial tan variada como tantas unidades y cometidos posee.
Con unidades especializadas como Bomberos, la Guardia Republicana, Inteligencia, Migración, Identificación Civil y otras.
Un capítulo especial para el Instituto Nacional de Rehabilitación.
Se han complicado muchas cosas para el Ministerio, pero también reconocemos que se toma con mucho compromiso la búsqueda de soluciones, con aciertos y errores.
El gobierno anterior incorporo pasantes para la atención en las comisarías. Por entonces me pareció inadecuado que personas sin el estado policial se familiaricen con documentación y procedimientos sin percibir la nefasta planificación de despoblar comisarías y convertirlas en meras oficinas receptoras de demandas y expedición de constancias.
Hoy, en otra realidad; y en el debe de repoblar las comisarías y convertirlas nuevamente en centro de referencia barrial creo que convendría retener a ese personal y ofrecerles la posibilidad incorporarse a la institución policial empoderados con las potestades del estado policial y con mejora salarial.
Son jóvenes con buen nivel educativo, dominio de actividades administrativas y probada adhesión al sistema.
La oferta de reincorporación de personas retiradas con fuerzas menguadas por los años y salarios reducidos, es una falta de consideración con los “veteranos de la policía” que solo pueden brindar su experiencia en tareas mansas y resguardadas como lo hace un sereno o un guardia de seguridad.
En esos menesteres si, seguramente serán de mucha utilidad tanto por su conocimiento de delincuentes, sus modos de proceder y los contactos con el personal activo que presta servicio en las diversas unidades policiales.
La idea de los allanamientos nocturnos es propia de quienes carecen de experiencia en cómo se realiza una inspección domiciliaria, la buena visibilidad es el 50% de una buena inspección, reduce riesgos y posibilidades de actuar errónea o ilegalmente.
Va en contrapelo con el criterio de la luc que amplía el ámbito domiciliario para aplicar el derecho de legítima defensa
Lo de Ministerio de Justicia otra equivocación y una manera de debilitar aún más al poder judicial y sin la opinión de los Ministros de la SCJ.
Se quiere crear otro monstruo súper poderoso, o se quiere cumplir con compromisos políticos.
Alguien hace números antes de lanzar estas ideas, cuánto dinero le sale al Estado crear otro Ministerio.
Sigue creciendo el Estado, siempre se habla de reducción de gastos, de achicar el Estado y de austeridad.
Cuánto dinero se ha invertido en esta gigante Fiscalía para aplicar este CPP copiado de los países del hemisferio norte con otra composición social e históricamente con otra forma de aplicar la justicia.
Y para colmo, una copia con imperfecciones.
Cuánto dinero absorbe en cada nuevo presupuesto.
¿En qué mejoro la justicia?
Las cárceles están atiborradas, lo denigrante del sistema carcelario fluye con noticias horripilantes.
El Comcar continúa presente. Recordemos la sumisión extrema de algunos individuos, víctimas de despiadados marginales.
Unos esmirriados y cadavéricos presidiarios permanecieron más de seis meses sin salir al patio por temor a castigos. Enfermos desnutridos.
Un video que circulo por whatsapp mostraba a un preso en ropa interior que era obligado a comerse una rata viva; y ahora un recluso primario fue sometido a todo tipo de vejámenes y retenido en su celda por casi dos meses
Ocupaba una celda junto a cinco individuos, tres de estos lo sometían continuamente a todo tipo de atrocidades, le hicieron conseguir dinero que le quitaron y no le permitían salir de la celda privándolo de alimentos, asistencia médica y cualquier beneficio.
Ha habido absoluta falta de control por parte de las autoridades que durante todo ese tiempo no advirtieron lo que ocurría.
Habrá responsabilidades penales pero el hecho no debió ocurrir.
Es obligación de la guardia interna recorrer en forma permanente y realizar los controles numéricos de la población carcelaria en forma diaria al ingresar al turno y en los horarios de cese de actividades.
El control debe hacerse en forma visual evitando engaños y cambios locativos sin autorización.
No es posible que esto pase inadvertido por tanto tiempo, pero el propio Ministro según publico El País habla de cuatro policías durante el día y uno durante la noche en el módulo 11.
Uno de los módulos más conflictivos y de mayor hacinamiento del Comcar.
¿Esa carencia de recursos humanos era de conocimiento de las jerarquías de ese establecimiento y del Director del INR.?
¿Qué medidas se habían tomado?
Hace pocos días se hablaba de auspiciosos planes de recuperación implementados. O solo se mira un sector del establecimiento.
Dice el Ministro que hay dos Comcar, uno que rehabilita y otro que no.
Discrepo, ninguno rehabilita.
Con tareas de horticultura y mantenimiento cortando pastos nadie se rehabilita, haciendo cosas que ya hacía antes de ser preso tampoco.
En los talleres y galpones muy poca cosa para una población de 4000 personas.
Son tareas que solo sirven para descomprimir. Para el preso liberado que no posee apoyos de familia o amigos, ni posee recursos o habilidades para un emprendimiento personal no hay reinserción social.
Este último denigrante episodio ha acelerado la decisión de construir más cárceles.
Larrañaga había planificado la construcción de cárceles de una planta en Artigas, Tacuarembó, Treinta y tres y Flores y una de seguridad en Libertad.
Eso estaba bien ideado, pequeñas para un máximo de 350 plazas
Ahora se plantea construir tres cárceles en el predio en donde ésta emplazado el penal de Libertad y tres barracones en el interior para que puedan trabajar en el campo siguiendo el programa de dignificar las cárceles.
Es una decisión equivocada que espero la revea, esto será un nuevo y más peligroso Comcar.
Lo primero en una cárcel es el orden, hacer cumplir las reglas y para ello debe haber más plazas que ocupantes.
También equiparando el número de plazas con el número de presos si todas las celdas son individuales.
La autoridad debe contar con los espacios que permitan aislamientos para proteger vidas, separar enfermos, imponer disciplina, realizar investigaciones internas, aplicar sanciones.
Los barracones dificultan el mantenimiento del orden y deben ser complementados con celdas para los mismos menesteres.
Debe centralizarse la atención sanitaria de los presos en un establecimiento carcelario para reducir custodias y disminuir traslados.
Es ilusoria la creencia en la recuperación de presos con trabajos internos de escasa demanda como las tareas rurales.
Lo esencial es un alojamiento digno y seguro para toda la población carcelaria. Y mucho material de lectura, de estudio o pasatiempo. Sin apoyos al egreso es difícil la reinserción, por eso hay tanta reincidencia.