Seregni: culpas y desaparecidos
Se desconoce su mensaje conciliador

Zósimo Nogueira
El Frente Amplio nació el 5/02/1971 en épocas turbulentas fruto de la conjunción de políticos escindidos de partidos constituidos y figuras públicas conocidas
Liber Seregni, Zelmar Michelini, Hugo Batalla, Alba Roballo colorados; Rodriguez Camuso y Enrique Erro, blancos; Valentín Arismendi, comunista; Jose Pedro Cardozo, socialista; Juan Pedro Terra Democrata-Cristiano; Julio Castro maestro y periodista, y Victor Licandro militar, como Seregni General.
Mucha agitación política en el área metropolitana y capitales departamentales con focos fermentales en los centros universitarios, en secundaria y en el movimiento sindical la CNT.
A influjo de la guerra fría la región estaba en armas.
En Uruguay operaban movimientos guerrilleros de izquierda con lineamientos pro Urss y también con concepciones Maoístas.
El más importante y numeroso fue el MLN; referente a nivel latinoamericano por su compartimentación en células que dificultaba individualizar a sus integrantes.
Éstos provenían en su mayoría de la clase media y media acomodada, del ámbito académico y universitario.
Convivían con otras organizaciones guerrilleras; como el MRO (Movimiento Revolucionario Oriental) iniciado por Ariel Collazo ex diputado blanco que luego de visitar Cuba se sintió influenciado por la revolución.
Se decían un movimiento clasista, antiimperialista, anticapitalista. Su aparato armado el FARO.
El MRO integro en su origen el FA y permaneció en él hasta el 21/4/996.
Conjugando actividades políticas y de apoyo revolucionario actuaban el 26 de Marzo, PVP, POR, anarquistas y otros.
La revolución se sustentaba y armaba con el apoyo de esas agrupaciones, de militancia oculta, de dineros provenientes del exterior y del producido por secuestros, extorciones y asaltos.
Hubo torturas, ajusticiamientos, asesinatos.
En apoyo del gobierno se expresaban cámaras de industria, comercio, terratenientes, diplomáticos y fuerzas vivas; se formo la Juventud Uruguaya de Pié, para combate ideológico, infiltración y primera línea de contención de las movilizaciones.
En el Uruguay el trabajo policial fue exitoso, se desarticulo y aprehendió a casi que toda la dirigencia guerrillera.
La oposición cuestionaba los métodos de detención e interrogatorios y se multiplicaban los pedidos de habeas corpus.
Muchos partidarios de la revolución desaparecían sin decir nada; huían o pasaban a la clandestinidad incorporándose a la guerrilla.
Mucha emigración, por la inseguridad, por temor a verse involucrados en la confrontación, o vínculos con actores en pugna.
El éxito policial fue opacado por fallas en la custodia carcelaria y fuga de sediciosos/as de Cárcel de Mujeres y Punta Carretas.
Ante esto el Presidente Pacheco Areco decretó el 9/09/970 “estado de excepción” las FFAA asumieron el mando de la lucha antiterrorista con tácticas militares.
Se crean el COSENA y el ESMACO (Consejo de Seguridad Nacional y Estado Mayor Conjunto)
El 28/11/971 hubo elecciones. Participó el Frente Amplio bajo el lema Partido-Demócrata-Cristiano con la candidatura del Gral. Liber Seregni.
Ganó el Partido Colorado, fue electo Presidente Juan María Bordaberry.
El más votado fue Jorge Pacheco Areco pero no alcanzó para la reelección.
Con la guerrilla derrotada, en reuniones entre guerrilleros y militares aparecieron ideas golpistas.
Querían saber sobre infidencia previo a una devaluación, en que involucraron maliciosamente a Jorge Batlle. Secuestraron al Actuario del Juzgado Escribano Queiruga pretendiendo hacerse del Expediente. Enterado el Dr. Jorge Batlle lo denunció por cadena radial y televisiva hablando de insubordinación y falta de disciplina de los militares. Fue detenido el 29/10/972 acusado y sometido a la justicia militar por “ataque a la moral de las fuerzas armadas”
Primer preso de la dictadura en plena democracia.
El 20/11/972 se le otorgo libertad provisional.
Esos entretelones y acciones golpistas también fueron denunciados por el Dr. Amilcar Vasconcellos en su libro “Febrero amargo”.
El 8/02/73 Bordaberry nombro Ministro de Defensa al Gral. Francese pero a su envestidura solo concurrió la Marina.
El Ejército y Fuerza Aérea no aceptaban su nombramiento.
El Vicealmirante José Zorrilla continuo apoyando y subordinado al Presidente.
El 9/02/73 cerró con barricadas la ciudad vieja. Entre sus oficiales también había disidentes.
Ejército y Fuerza Aérea en conjunto emitieron comunicados señalando estar empeñados en la defensa del país y sus valores sin impronta política.
El Partido Comunista y parte del Sindicalismo alentaban un golpe de Estado modelo Velazco Alvarado de Perú.
El 11/02/973 Zorrilla renuncio; asumió el Capitán de Navío Conrado Olazabal que adhirió a las proclamas del Ejército y Fuerza Aérea.
Seregni en acto público dice que Bordaberry debe renunciar.
La entrega del poder.
El 12/02/973, Bordaberry concurre a Boizo Lanza y se subordina a los militares.
Suscribe un acuerdo creando el COSENA (Consejo de Seguridad Nacional), nombra en el Ministerio de Defensa al Dr. Walter Ravenna y en Interior al Coronel Dr. Néstor Bolentini.
Mas presiones militares y el 27/06/973 “golpe de estado”; se disuelve el parlamento, se crea el Consejo de Estado presidido por el nacionalista Dr. Martin Etchegoyen. Evidentemente, nada fue improvisado.
El 12/06/976 Bordaberry fue destituido. Los militares lo tratan de extremista, pero solo quieren más poder.
Nombraron Presidente al Dr. Alberto Demichelli (colorado).
Se suspendió la convocatoria a elecciones y creó el Consejo de la Nación con poderes para designar Presidente, integrantes del Consejo de Estado, Suprema Corte de Justicia. Tribunal contencioso y Corte electoral.
Demicheli se negó a más proscripciones sobre políticos y fue reemplazado por Aparicio Mendez, quién accedió a los requerimientos militares.
Estuvo entre 1/09/1976 y 1/09/1981 cuando lo relevó el General Gregorio Álvarez.
En ese contexto vivió el General Líber Seregni.
Fue preso el 9/07/973 junto con el General Licandro, luego de una protesta callejera al golpe de estado. Fue liberado el 2/11/1974.
El 11/01/976 fue despojado del rango militar y condenado a 14 años por Sedición y traición a la patria.
Cumplió la prisión en Cárcel Central. Fue liberado el 19/03/1984.
El 05/03/996 renuncio a la Presidencia del FA por hostilidad de radicales y discrepancias con Tabaré Vázquez.
Tratando sobre “desaparecidos” el 22/06/2010 en entrevista con Néber Araujo muestra su impronta conciliadora.
Habla de la búsqueda de una conciencia colectiva sobre los derechos humanos. Son derechos ínsitos a todas las personas.
Más allá de las conceptuaciones. ¿Hubo violación de derechos humanos? Hagamos introspección, no en función a ideas políticas, eso no ayuda a crear el clima.
Dice: el FA nace para enfrentar a un gobierno considerado autoritario con un grado de permisividad de sus instituciones. Nace como una fuerza pacífica y pacificadora contraria a todo extremismo, a toda violencia. A la hecha por ambos bandos.
Me reprocho no haber condenado con la suficiente energía los desbordes del MLN.
Araujo menciona: secuestros, asesinato de los soldados, Pascasio Báez, y Seregni agrega, “entre otros”
Rescata el valor de la vida de todas las personas, como única forma de encontrar y dar soluciones sobre los desaparecidos. Hay que manejarse con ponderación.
Ante dichos de Mujica, de que era como un desertor que participo en el análisis de la resistencia armada. Dice no acepto agravios, ni destrato.
Estoy en una edad que no busco nada, ninguna porción de poder. Polémica de ideas, si. No agravios.
Reitera que el FA nace en tiempos de violencia con una estrategia distinta a la lucha armada pidiendo paz para los cambios y cambios para la paz.
Quitémonos la venda de los ojos.
Se le pregunta: ¿El Ejército debe pedir perdón? Dice que no.
Que eso es un proceso individual; de quien considera que cometió un exceso en el ejercicio de su función, aquellos que violentaron sus votos.
Las instituciones no piden perdón; la Universidad, el Parlamento, la justicia. Alguien puede esperar que las instituciones pidan perdón.
Por eso su búsqueda de entendimientos, por todos lados, reclamos propios y de los demás. Esta valoración tiene un profundo efecto religioso.
Los familiares no pueden hacer su duelo.
Quiero rescatar los derechos humanos para todos, buscar soluciones auténticas.
No está de acuerdo en la aplicación de penas. Rige la ley de impunidad.
El quién y castigar a quién, quedo laudado. Hay diferencias entre culpas y responsabilidad. Los estados tienen responsabilidad.
¿Cuando alguien pide perdón, quién lo concede?
En el tema “desaparecidos” no hay una conciencia colectiva.
Derechos para unos y no para otros es como parte de una doctrina totalitaria.
Es justo el reclamo de familiares sobre los desaparecidos, pero hagamos introspección.
¿En la cárcel del pueblo hubo violación a los derechos humanos?
Todos debiéramos prestar atención a su pensamiento conciliador.
Siguiendo su criterio habría mucha más información.
Con ésta postura de castigo y no olvido, hay poca información. El tiempo y las muertes la llevan.