Tu primer voto

Ronald Pais

Para quienes tenemos unas cuantas elecciones nacionales encima, el momento de votar en ellas no deja de ser emocionante. Cuando el sobre se desliza dentro de la urna, va con él nuestra esperanza de que hayamos contribuido a una decisión popular y soberana que elija a los mejores para conducir los destinos de nuestro país.

También sentimos que ese acto no es nada baladí. Se trata de algo muy importante en nuestras vidas. Después los hechos harán que nos alegremos de nuestra decisión o que nos arrepintamos. Es bueno asegurarse de que ocurrirá lo primero y no lo segundo.

A los jóvenes que votarán por primera vez en las próximas elecciones, tal vez les venga bien algunos “tips” que creo recomendables para tener en cuenta.

.1 Tu voto es lo más importante que harás en cinco años

Sé que estás en edad donde hay otros incentivos mucho más atractivos que la política. El amor, el sexo, la música, los viajes son mucho más entretenidos que sumergirte en ese mundo de gente que no termina de inspirarte confianza y que parecen ser todo lo mismo.

Este es un tema muy antiguo y tal vez te sirva recordar aquella frase de Platón: “El precio de desentenderse de la política es el ser gobernado por los hombres peores”. Si eliges abstenerte de tomar decisiones en Política, otros van a tomar esas decisiones por ti y sólo te tocará soportar las consecuencias.

.2 Vota sólo a quién sea garante de convicción democrática.

Tal vez creas que la Libertad y la Democracia son dones que has heredado y que se mantendrán sea lo sea que votes. No te engañes.

Para muchos totalitarios, el voto popular ha sido solamente el medio para alcanzar el poder y una vez encaramados en él, han aflorado sus verdaderas intenciones. No te dejes engañar.

Me pregunto cuántos votantes de Hugo Chávez lloran hoy con amargura su terrible y errónea decisión que lo llevó a alcanzar el gobierno de Venezuela en 1999. Fue el comienzo del fin.

Me pregunto cuántos de los jóvenes que hoy son asesinados en las calles de aquel país por la represión dictatorial ofrendaron su sangre tratando de recuperar la libertad de la que hoy tú gozas.

Tienes la responsabilidad de conservar esos atributos esenciales de la convivencia humana, asegúrate de no equivocarte en esto porque si lo haces todo lo demás no importará.

.3 No te dejes llevar por la envoltura, examina bien el paquete.

Andrés Oppenheimer dice que hoy el packaging vale más que la camisa. Yo soy de los que examino más la camisa que la envoltura con que te la presentas. El packaging terminará en la basura, la camisa en tu cuerpo.

No es bueno votar “Porque me gusta”, “porque me cae bien” o “porque habla bien”, lo importante es tratar de desentrañar cuales son las verdaderas ideas del candidato, quienes lo rodean, cuál es la forma o los métodos que practica en política.

Mucha gente vota emocionalmente pero aquí no se trata de enamorarte sino de elegir al mejor.

.4 Sospecha de un candidato que se esconde o que elude pronunciarse sobre los temas que te importan

Si un/a candidato/a no es claro/a sobre lo que piensa del aborto, de la liberalización de las drogas, de cómo se combate al delito, de cómo visualiza el posicionamiento del país en el mundo y en la región, de lo que piensa sobre el desarrollo productivo del país, de cuál es su propuesta para la creación y mejora de las fuentes de trabajo, de cuál será su política en materia de impuestos y tarifas, de qué régimen de retiro o pensiones quiere, de cómo debe ser gobernada la educación y cuáles deben ser sus contenidos, de cómo deben funcionar los sindicatos, de cuáles son los cometidos esenciales del estado y cuáles deben ser desarrollados por el ámbito privado, etc., desconfía de ese/a candidato/a. O no sabe ni está preparado o esconde al cangrejo debajo de la piedra.

Aunque no leas los programas que se presentan, al menos trata de conocer qué piensa realmente quién se postula.

.5 Recuerda que “dime con quién andas y te diré quién eres”

¿Cuáles son los referentes internacionales del candidato? ¿A qué políticos o partidos de otros países apoya o se ha manifestado a favor? ¿Cuáles han sido sus pronunciamientos ante hechos mundiales de notoriedad: la situación en Medio Oriente, la de países convulsionados como Cuba, Venezuela, Nicaragua, etc.? ¿Cómo visualiza el relacionamiento del Uruguay con los grandes actores mundiales: EE:UU, China, Unión Europea? ¿Qué partidos, sectores, organizaciones o personajes públicos lo apoyan en el ámbito nacional?

.6 Pregúntate si quien piensas votar “resiste archivos”

¿Es una persona de pasado intachable o tiene “muertos en el ropero”? ¿Se ha conducido correctamente en su vida pública, profesional o familiar? ¿Ha recibido cuestionamientos fundamentados por su desempeño público con anterioridad?

Si es un candidato/a a Presidente, el análisis y la pregunta alcanzan también a su compañero/a de fórmula.

.7 No te guíes por la publicidad o las encuestas

En una sociedad de consumo como en la que vivimos, es normal que nos guiemos para comprar nuestro celular, nuestra ropa y hasta nuestro auto por información que hemos recibido a través de la publicidad.

Es bueno que recuerdes que tal vez como en ninguna otra cosa, la publicidad política puede ser engañosa.

Un buen jingle, una buena imagen del o la candidato/a puede influenciarnos pero no al punto de decidir el voto.

Éste tiene que estar afianzado en otros elementos mucho más importantes. La función principal del gobernante electo no deberá ser dedicarse a sus apariciones en los medios de comunicación. Si bien es deseable que mantenga una buena comunicación con la población, su actividad importante será la de gobernar y para ello debe tener los atributos necesarios.

Ya hemos tenido políticos que lograron sintonizar la veta de comunicación que los conectó con el pueblo. No obstante, como gobernantes fueron un desastre. Tenélo en cuenta.

Lo mismo cabe decir de las encuestas. En general no se limitan a reflejar las tendencias y estado de la opinión pública. La mayoría de las veces tienden a formar opinión pública y otras tanto le erran feo en sus predicciones.

.8 Jugar a ganador no es lo mejor para decidir tu voto

A muchas personas, le gusta sumar su voto a quién visualizan con más chance de ganar. Hincharán el pecho si el resultado es el que esperan y dirán: “Yo lo/la voté”.

Deberás tener en cuenta que, si bien, el o la candidato/a más visible será quién aspire a la Presidencia, en nuestro régimen constitucional se elige mucho más que eso en primera vuelta.

Por ejemplo, elegirás nada más ni nada menos que a los integrantes de la Cámara de Representantes y de la Cámara de Senadores.

Serán ellos, diputados y senadores, quienes durante cinco años aprobarán y sancionarán las leyes que regirán tu vida. Es recomendable que en esa integración estén representadas diversas vertientes políticas de nuestra sociedad. La voz y el voto de las minorías puede ayudar a encarrilar asuntos legislativos de importancia y es bueno que su opinión pueda hacerse oír.

Tu mejor voto no tiene por qué ser al ganador, debe ser a quién tu creas que te puede representar mejor en tan importante función.

Para elegir Presidente, seguramente tendrás la chance de hacerlo en la segunda vuelta.

.9 Tómate tu tiempo, solamente será cada cinco años.

Asegúrate de tener con tiempo tu documentación en regla para poder sufragar. No esperes hasta el último momento.

Analiza cuidadosamente la oferta electoral. No dejes que la bulla propagandística sea un ruido aturdidor lejano del que no quieres ni saber. Tienes que entender que lo que está en juego no es un asunto de otros, es tu propio destino, es tu propio futuro y el de otros muchos jóvenes como tú.

No votes por tradición ni por la influencia de nadie. Esta es una decisión sólo tuya con tu conciencia.

.10 Consigue las listas de candidatos y revísalas con cuidado

Tal vez podrás encontrar nombres y apellidos conocidos que te podrán inspirar mayor o menor confianza. Que te inclinarán por una opción determinada o te alejarán de ella.

Finalmente, lleva la o las lista/s que hayas elegido al lugar de votación. No la exhibas, simplemente llévala entre tu ropa cuidadosamente doblada, sin manchas ni marcas. Te abreviará los tiempos en el proceso de votación y te asegurará que dispondrás de lo que hayas elegido, evitando cualquier faltante de listas que ocasionalmente pueda ocurrir en el lugar en que te toque emitir el sufragio.

Amigo lector: créeme si te digo que nunca olvidarás tu primer voto. Ojalá sea para confirmarte, cada vez que lo hagas, que elegiste lo correcto. Para ello te pido que seas un buen ciudadano: infórmate, analiza, reflexiona y después decide. Puedes ser frívolo y superficial en todo lo que quieras, menos en esto.