Australia, Rusia, y Vaticano
Ni discapacitados, ni “mariconada”
Lorenzo Aguirre
El treinta por ciento de la población en Australia, es inmigrante, la cual fue en busca de un “hogar de paz y cultura” que, otrora, dicho país prometía a extranjeros, como asimismo un trabajo bien remunerado para una “vida plena de cosas buenas”. Los hechos, están demostrando algo diferente, especialmente con quienes padecen discapacidad, o enfermedades graves. Por otro lado, el “007 ½” “Bond” Putin, ha incluido al movimiento “LGBTI +”, en la lista de “organizaciones terroristas”, y un decreto señalando que dicha colectividad no puede continuar trabajando, o acceder a reparticiones del Estado. Para decorar la torta, el Papa Francisco I manifestó a los obispos en la “Santa Sede”, que “hay demasiada mariconada en los ambientes de seminarios”.
El gobierno del Primer Ministro de Australia, Anthony Albanese, está rechazando sistemáticamente los visados de inmigrantes que necesitan atención médica, existiendo un control férreo en el sistema de salud, y los expedientes financieros relacionados con tratamientos a enfermos con discapacidad pautan los costos en cuidados, no debiendo superar los 57.000 dólares en 10 años, algo parecido a los conceptos y “enfoques” políticos en Nueva Zelanda.
Las autoridades australianas manifestaron que, la Ley, debe defenderse porque para algo está, y la misma, obviamente frena el gasto público, mientras “Sanidad” ha elevado con carácter de urgente las “desprolijidades de gastos por parte de los ciudadanos con discapacidad”, al mismo tiempo que expresa una diplomática respuesta: “los visados no se rechazan desde el aspecto técnico” … ¡claro, tampoco se conceden!
La segunda respuesta, es: “quizá, algunos puedan solicitar recurrir la decisión… eso no se prohíbe, pero el proceso es costoso.”
En la década de 1970 – aunque con menor intensidad -, continuaba todavía la política de “Australia Blanca”, iniciada a comienzos del siglo XX con la famosa “Ley de Restricción de Inmigración”, poniendo trabas a inmigrantes “de color” … ¡nunca, entendí bien ese “término delicado”! … ¿acaso, los “blancos” no tienen color?
Las discriminaciones por discapacidad también se originaron a comienzos del siglo pasado; hoy, la población australiana, expresa: “se sigue tratando a esas personas del mismo modo que en 1901, y para el gobierno, no son bienvenidas”.
Lo cómico y atrevido es, que, la propia “Ley de Migración” está liberada de la “Ley de Discriminación por Discapacidad”.
Traducido al español: no importa quien fue a vivir a Australia, tampoco si ha nacido allí, como asimismo no es válido si lleva seguro médico – aunque sea privado -, porque el gobierno considera que, esa persona, es una carga económica.
Las autoridades señalaron que unos 1.800 no cumplen con las condiciones, y según el Ministro de Inmigración, Andrew Giles, “si son nacidos en Australia, pero afectados negativamente por las normas sanitarias de migración, pueden solicitar intervención ministerial”.
El trámite burocrático es largo, mientras tanto no existe habilitación para trabajar, y en caso de perder la petición tienen un mes para abandonar el país, bajo el “diagnóstico” “encima del umbral de coste significativo”.
Ahora, como si fuera poco, el gobierno australiano busca eliminar el apoyo educativo, afectando a familias que tienen hijos con enfermedades tipo síndrome Down, o autismo.
¡Al final de cuentas, las personas con discapacidad, pero nacidas en Australia, tampoco son bienvenidas!
La forma simpática de decir … ¡preferimos, no tenerte!
Putin; “las LGBTI +, son terroristas”
El descafeinado presidente Vladímir Putin, más allá de su guerra con todo el mundo, no ha perdido tiempo en abordar asuntos internos “educativos y sociales” al implantar un articulado “Ley”, el cual mutila derechos a homosexuales y lesbianas, además de darles de baja en todos los centros laborales del Estado, “porque degeneran los valores de la tradición rusa”.
En efecto, el “007 ½” de la KGB ha incluido al movimiento “LGBTI +”, en la lista de organizaciones terroristas.
La Resolución, se agrega a las medidas adoptadas que prohíben todo tipo de actividades y demostraciones públicas, además por supuesto de sancionar los “tratamientos de reafirmación de género, y cambio de sexo en los documentos de identidad”.
Por su parte, el “Tribunal Supremo” avaló el petitorio del “Ministerio de Justicia” para declarar al movimiento de referencia, como “organización terrorista y extremista, por incentivar a la discordia religiosa y social”.
Además, la legislación rusa pauta que, “personas, o asociaciones que financien organizaciones terroristas o extremistas, serán condenadas con penas de 10 años de cárcel”, más allá que, el “Servicio Federal de Vigilancia Financiera” – “Rosfinmonitoring” -, está habilitado para congelar los depósitos bancarios.
¿Qué dicen los ultraizquierdistas y colectividades “LGBT” en nuestro país? … ¿pensarán que Putin está discriminando?
¡Pongan a un lobo a redactar leyes, y verán que, devorar ovejas, no es delito!
El Papa… furioso con la “mariconada”
La Iglesia Católica está transitando una etapa comprometida, crítica, debido a los problemas de corrupción sexual, y además ahogada, porque, en buena medida su historia ha pasado a ser para muchos, un cuento que no creen ni los niños.
Estamos inmersos en una sociedad a la cual no le interesa lo trascendente, son tiempos con buena cuota de ateísmo, de fluctuaciones, donde los valores se van desvirtuando. El “mundo humilde” se podrá apreciar en ciertas parroquias perdidas, en devastados y olvidados parajes alejados de la “mano de Dios”, mientras en centros importantes el vil metal cobra presencia.
Algunos sacerdotes viven de contribuciones que fieles dejan en cada misa, otros se quejan porque la “limosna no alcanza para comer”, y un poco más lejos nos encontramos que, la mesa para “compartir el pan de la frugal cena” goza de propuestas más refinadas que el destartalado tazón con avena y leche, del padre Esteban.
Al parecer, los dioses están mirando un poco menos hacia un lado, pero – al decir del Papa Francisco I –, “ser pobre, es una virtud … ¿entonces, por qué quitárselas?”
Ahora, nuevamente, Francisco I se ha desdoblado en Bergoglio, poniéndose furioso, y expresó a los obispos “no ordenar sacerdotes ni admitir en el Seminario a personas homosexuales”, para luego señalar: “hay demasiada mariconada en el ambiente de los seminarios de Italia”.
Asimismo, el Papa Francisco I, rogo “acompañar con respeto y delicadeza, a los candidatos rechazados”, y más tarde señaló lo establecido en la “Instrucción” de 2005 – reafirmada en 2016 por el propio Francisco I -: “la Iglesia no puede admitir al Seminario, y a las Órdenes Sagradas, a quienes practican la homosexualidad, o sostienen la llamada cultura gay”.
A propósito… el “emisario del Señor” … ¿puede ponerse furioso?