Biblioteca Nacional, la digitalización y el diario “El Día”

Daniel Manduré

Muchas veces se cree que una biblioteca contiene en su interior únicamente una invalorable cantidad de libros. En realidad, no es así. En muchos casos también conservan materiales especiales de un gran valor histórico, como mapas, láminas, afiches, manuscritos, diarios, revistas, semanarios, una pinacoteca, entre otros.

A ese material muchas veces recurren historiadores, escritores, periodistas, investigadores independientes en busca de información que le brinde veracidad y mayor contenido a sus obras, con la que seguramente luego nos deleitamos todos.

Eso sucede en nuestra primer y principal biblioteca, la Biblioteca Nacional, fundada un 26 de mayo de 1816 que guarda en su seno un material histórico riquísimo, en esa función esencial de conservar, recopilar, proteger, acrecentar, procesar y difundir nuestro acervo cultural.  Ese compromiso inclaudicable que nos viene desde el fondo mismo de la historia de hacerlo accesible para todos los ciudadanos.

La tecnología vino para quedarse, no debería ser vista como enemiga, adversaria o competidora, sino que con inteligencia verla como aliada  y como complementaria de una actividad concreta.

Hace unos años muchos pronosticaban la muerte de los cines cuando la tecnología irrumpió con fuerza. Sin embargo, no fue así, después de un proceso inicial dificultoso, tuvieron que aggiornarse, se transformaron, se adaptaron a los nuevos tiempos y allí están.

Lo mismo se ha dicho de las bibliotecas, cuando hoy hay una gama variada de alternativas para acceder a información a la que antes solo se accedía a través de un libro, de una biblioteca. Las mismas, viven, luchan y están tan vigentes como siempre.

Al igual que otras áreas debieron transformarse y utilizar con inteligencia las bondades que la tecnología ofrece, ver en ella un aliado.

En su momento la propia Biblioteca Nacional como la del Poder Legislativo y muchos otros organismos del estado como el Banco de Seguros, Banco República, Intendencia de Montevideo, entre otros, decidieron guardar y proteger su información y su valiosa documentación a través de la técnica de la microfilmación, que permitía agrupar en pequeños micro archivos miles y miles de documentos en papel, que el transcurso del tiempo iba deteriorando.

Con la aparición de la computadora se profundizó notoriamente ese avance hacia lo tecnológico.

La Biblioteca Nacional no escapó a ese proceso continuo de transformación, que todos tuvimos que asumir a pesar siempre de esos inicios naturales de resistencia al cambio.

En ese sentido la Biblioteca Nacional encabezada por su director Valentín Trujillo y a impulso de funcionarios comprometidos, ha decidido digitalizar parte de su acervo, como forma de acceder y preservar el patrimonio cultural a través de las nuevas tecnologías y protegiendo siempre los derechos de la propiedad intelectual.

Entre ellos los archivos fotográficos del diario “El Día”, ese histórico diario fundando en 1886.

Ese bastión de la democracia, refugio de los más altos valores republicanos. Esa expresión auténtica de libertad y de libre pensamiento, verá digitalizado sus archivos fotográficos que también contienen en su interior los correspondientes artículos de prensa de ese riquísimo material político, social y cultural.

Gran iniciativa, porque el inexorable paso del tiempo juega su partido y va deteriorando poco a poco el documento en papel, más allá de su cuidado.

La tarea la realizarán los profesionales la sala de “Materiales Especiales” y el departamento de “Conservación y Restauración” que con gran compromiso asumen ese desafío.

Relevante acierto de la Biblioteca Nacional que en este caso contribuirá aún más, a inmortalizar las ideas de su fundador Don José Batlle y Ordóñez.