Crónica Policial

BID subvenciona proyectos

pero la realidad la pagarán los contribuyentes

Zósimo Nogueira

¿Queremos seguir agrandando al Estado?

Planes de asesorías y mesas de coordinación integrando las actividades de múltiples instituciones. Se globaliza y se diluyen responsabilidades.

Anuncios de retornar a caminos perimidos sin analizar  las causas por las cuales fueron dejados de lado, y sin la visión de los antiguos gestores con su versión de bondades y dificultades de aplicación.

A lo de la Policía comunitaria, al vecino alerta, a las mesas de convivencia y todas estas formas de interacción que han variado de denominación nos hemos referido.

Fueron exitosas y pueden retomarse parcialmente, pero requiere de una evaluación por parte de sus protagonistas políticos y policías.  

No por parte teóricos, ni por políticos ansiosos de protagonismo que solo aportan sensibilidad; sus percepciones sobre la seguridad o inseguridad que se vive.  

Proyectos que generaran una nueva carga para los contribuyentes.

Y todo en base a una superposición de tareas, cuando en nuestro país la carga impositiva se torna agobiante.

Siempre con idea de crearse cargos y unidades y no de corregir, aggiornar

Hace poco el Comisionado parlamentario se oponía a una propuesta de Cabildo Abierto superponiendo tareas respecto a la población carcelaria. El Dr. Petit lo tiene claro: en el ejercicio 2022 su pequeña institución tuvo créditos por $442.590,032, ¿cuánto demandará esta pluri propuesta, quién la pagará?: Juan pueblo.

Hay instalada una gran avidez por la administración de los dineros públicos. Beneficios y empoderamientos con cero riesgos.

Crear una nueva unidad implica implícitamente, disponer de personas para tareas administrativas y logísticas; si esa tarea se asigna a una unidad existente, variara la modalidad de hacerlo en determinado ítem, pero no varían los recursos humanos, solo se actualizarían.

Los cambios necesarios deben hacerse en forma gradual, revalorando a los individuos ya integrados al sistema.

Cumplir promesa de repoblar las Comisarias Seccionales es determinante para la mejoría o no de la seguridad, en especial en su aspecto preventivo.

La recorrida, contacto con la población, el acercamiento de la comunidad al centro referencial de socorro, auxilio, intermediación en conflictos que fue y debe ser “La comisaria”. Genera confianza.

En tiempos lejanos se controlaban y expedían guías de tránsito de ganado, los partes de choque simple y siempre fue lugar de encuentro e implementación de las más variadas actividades de otros ministerios.

Eso aparejó sobre carga laboral y de responsabilidades. Paulatinamente fueron retirándose esas obligaciones y derivadas a otros organismos.

En tiempos cercanos, con el retorno a la democracia se buscó retornar a un acercamiento con la comunidad para una búsqueda conjunta de solución a los problemas de inseguridad y desorden.

Surgió lo que se conoce como policía comunitaria.

Los comunitarios eran personal de confianza del Comisario, con flexibilidad horaria, pero los procedimientos, custodias y actividades deportivas, futbol, básquetbol, etc; lo fueron sacando de su actividad específica.

Por el 222, se pasaron a cobrar muchos servicios de seguridad.

Al poco tiempo este segundo trabajo de los policías se convirtió en una complicación  para la variación habitual de horarios laborales.

Hoy con la sindicalización lo sobredimensiono, pero justo es decirlo ha venido acompañado de mejoras salariales.

Nada de esto ha sido mencionado y analizado  por Sanjurjo y sus consultores

El golpe de gracia a los comunitarios llego con Jefaturas operacionales.

Concentraron tareas, mala copia de los ya perimidos Distritos de la policía norteamericana. 

Ya hubo un intento de este formato por el año 2005, a impulsos de admiradores del formato policial de EEUU pero resistido por policías con pasado en las Direcciones tradicionales (Seguridad-Investigaciones-Grupos de Apoyo) y desarticulado por el Sub Secretario Ricardo Bernal ya gobernando el frente Amplio.

Los ideólogos de ese formato persistieron y su implementación fue preámbulo no dicho del actual sistema Procesal Penal. Habilidad solapada.

Estas Jefaturas operacionales; se alejaron del damnificado o usuario, se actúa rápido pero sin continuidad en el territorio y sin conocimiento de los movimientos habituales.

La propuesta de esta mesa política, nada tiene que ver con la dinámica pretendida con la LUC, se asemeja a criterios de los Directores de la Policía de la era Bonomi y de su mayor vocero el sociólogo Gustavo Leal.

Discrepo con Leal sobre sus métodos y soluciones en seguridad.

La manera de desplazar a las autoridades policiales sacándoles responsabilidades inherentes a la función.

Pero le reconozco experiencia y conocimientos sobre el tema.

Como dice el Dr. Zubia en Búsqueda. En estos temas no hay posiciones monolíticas, pero “los delincuentes están en el país ideal”

Refiere a la mediatización de Fosatti, Astesiano, Leal, y al fiscal de Corte Juan Gómez.

Al hecho de que éste ha actuado condicionado por presiones, se agrega la inestabilidad por su situación de interinato que termina responsabilizando al Presidente que no quiere líos en estos temas, y que por eso no ha designado a un nuevo Fiscal de Corte, permitiendo que se prolongue este interinato.

También discrepa en materia de Seguridad, dice que hay que tener los pies firmes pero no quieren enfrentamientos con el poder político.  Que es real, los homicidios crecen.

La concepción de Seguridad Pública de la LUC se ha ido desvirtuando, ha habido un viraje acercándose a los conceptos del FA. 

Sobre el documento elaborado por Sanjurjo y sus convocados dice que se trata de un documento de nivel académico, tecnológico y tecnocrático desmedido.

Creando comisiones con participación política, estrategia, consultores e informes técnicos.  Como si fuera una operación científica pero la realidad esta bajada a tierra.

Cuando no existen posibles soluciones inmediatas se apela al futuro, a los diagnósticos. Sobre las cárceles dice lo principal es el control, sin este no hay rehabilitación.

Agrego, si se quiere dilatar algo, o que no salga, crease una comisión.

En otro artículo de Búsqueda el Coordinador de Estrategias Focalizadas de Prevención Policial del Delito del programa integral de Seguridad Ciudadana, Sanjurjo, repite  que en tres meses de mediar en los barrios la terea a asigbarse a los ex reclusos, tiene que verse reducido el número de homicidios.

La cifra de homicidios es oscilante y este crimen obedece a diferentes situaciones, no tiene un padrón único pero la policía en conjunto con la comunidad puede adoptar medidas para que disminuyan, lo mismo que la mayoría de los delitos del ámbito público.

Pero nunca involucrando a ex convictos y mucho menos de manera abierta.

Hay códigos mafiosos que no se rompen y que en la actualidad se reflejan con mayor violencia.

Si falla su diagnóstico, ¿cuál será su responsabilidad y la del Ministro del Interior? Creo se está caminando sobre la cornisa.  

A los Jefes, los han cambiado.

Decía el representante de Cabildo Comisario Mayor  (r) Jorge Gómez, de reforzar a las comisarias. Vengo bregando por ello desde que las vaciaron. Pero con buen número de efectivos  y su estructura piramidal.

Tremenda y deliberada equivocación, alineada con los nuevos cambios programados en materia procesal penal.

Y también con postulados guerrilleros; siempre dijeron de debilitar y desarticular el aparato represor del Estado.

Sobre las cárceles retomaremos el tema en otra oportunidad.  

El Ministerio del Interior da pasos equivocados, tiene la mayor fortaleza de conocimiento y experiencia en seguridad y anda planificando soluciones a futuro cuando es hora de ejecutar, cumplir  propuestas.          

La seguridad tiene como horizonte la Justicia.

La prioridad son las personas y sus libertades.  La policía debe asumir su responsabilidad.  ¿Faltan efectivos? ¿Están bien distribuidos?  Que haya ingresos, que se los instruya. No soñar, ni proyectar.

Perogrulladas. Neófitos deslumbrados.  (Sean Serios. Dr. Juan Fagúndez)

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