Carolina “La Oscura”

Daniel Manduré

El filósofo griego Heráclito de Éfeso era conocido por sus contemporáneos como Heráclito “El Oscuro”, porque sus escritos eran muy difíciles de entender. Muchos opinaban que sus trabajos desconcertaban. Arrogante por naturaleza, con un sentimiento superior, que lo llevaba a despreciar al común de los mortales. Planteaba sus ideas muchas veces con acertijos para el desconcierto de la mayoría. Sus ideas reproducían la ambigüedad y la confusión de la realidad. Muchos no lograban entenderlo.

La gestión de la Ing. Cosse al frente de la comuna capitalina, se parece en muchos aspectos, a los escritos y a la vida misma de Heráclito “El Oscuro”.

Una gestión repleta de acertijos, donde hay que adivinar que se pretende. Decisiones que confunden, ambiguas, difíciles de entender y cuyas medidas vienen acompañadas de su usual soberbia, imposible de ocultar.

Hace poco fue la increíble iniciativa de buscar limpiar la ciudad eliminando las papeleras de plazas y parques, sacando además los cuida parques y solicitándole a los vecinos que caminen 150 o 200 mts en la búsqueda de un contendedor, que por cierto, se renovarán, pero habrán mucho menos.

Ahora anuncian la creación de ciclovías por el medio de nuestra principal avenida, de 18 de Julio y en un tramo de la acera norte de la calle San José, desde el Obelisco hasta la Pza. Independencia.

Mal pensada y con mucho de improvisación. Tal es así que, al consultar al director de Movilidad, Inthamoussu sobre dudas que surgen en torno a tan aventurado proyecto la respuesta es: “…eso no lo tenemos definido, lo estamos evaluando”.

Una propuesta similar ya había sido rechazada durante la administración del Ing, Daniel Martínez. Resistida en aquel momento por todos los sectores involucrados. Esta iniciativa, es incluso, menos ambiciosa que aquella, pero ambas con mucho de improvisación y estratégicamente equivocadas.

Llevada a los ponchazos, con mucho de compromiso clientelìstico y arrebato demagógico. Para complacer a determinado colectivo y en detrimento de la amplia mayoría de la ciudadanía.

Se realizará en lugar equivocado, sin las garantías de seguridad necesarias y entorpeciendo y agravando aún más la ya caótica movilidad en el tránsito.

No forma parte de un programa o proyecto global de movilidad para la ciudad donde los sistemas alternativos y amigables del transporte sean parte integradora de estos.

No hay un estudio serio que lleve a crear una red de ciclovías global, que estén conectadas unas a otras. Un experto decía: “las mejores ciclovías son las que no le saca el espacio a nadie”, agregaba también:” para saber si una ciclovía es segura hay que preguntarse: ¿dejaríamos que un niño de 8 años transite solo por allí?”. En la propuesta por Cosse, claramente NO.

Muchos especialistas internacionales ven negativo y poco aconsejable una ciclovía por el medio de nuestra principal avenida. Varios sectores de los involucrados dicen no haber sido consultados, entre ellos la propia UNASEV. Ni siquiera los pocos que la acompañan la apoyan con fervor ni están muy convencidos, “es mejor que la nada» han dicho.

Donde unidades de gran porte irán apenas a 20 cm de distancia de los ciclistas, hacia un lado y hacia el otro.

Una propuesta que nos costará, de acuerdo con los anuncios, más de un millón de dólares y que va a terminar, como el corredor Garzón, en un rotundo fracaso.

La mayor parte de las ciclovías implementadas (Ciudad Vieja o Fernández Crespo, entre otras) no han tenido los resultados buscados, se utilizan muy poco. Y quienes optan por usarlas tiene varios inconvenientes en la lucha con camiones que no tienen donde descargar mercadería, peatones que la usan para caminar porque las veredas son muy angostas, como sucede en Ciudad Vieja, entre otros tantos problemas.

Lugares en el mundo, entre ellas varias ciudades del España, donde, por haberlas planificado muy mal o en lugares inadecuados, hoy estudian eliminarlas.

¿O será tal vez que la idea de esta ciclovía, ya descartada en el pasado, lo que persigue es bloquear ese proyecto anunciado por el gobierno nacional sobre el Tranvía?

Esa propuesta de inversores privados de un tren amigable con el medio ambiente que iba a mitigar las emisiones de dióxido de carbono y cuyo recorrido, mucho más rápido, iba a atravesar Giannattasio, Av Italia y 18 de Julio hasta Plaza Independencia.

Todo muy ambiguo como Heráclito de Éfeso. ¿Saben cómo murió ese filósofo griego? Padecía una enfermedad, denominada Hidropesía, lo que hoy conocemos como edema, una inflamación de los tejidos que llevaba a acumular líquido debajo de la piel. Ese sentimiento de superioridad que abarcaba todos los aspectos de su vida lo llevó a no confiar en la propia medicina. Confiaba solo en sí mismo, por lo que intentó buscar una solución propia a su enfermedad. Fue a un establo y se cubrió con estiércol de vaca, pretendiendo que ella absorbiera la humedad que invadìa su cuerpo. Después de un día en esas condiciones y bajo el sol, murió tapado por el estiércol, para luego ser devorado por los perros.

Carolina “La Oscura”, confundida y con decisiones desconcertantes, ambigua y arrogante, ojalá que, por el bien de nuestra ciudad y de nosotros sus habitantes, su gestión no tenga el mismo fin que tuvo Heráclito de Éfeso.

Aunque pareciera, lamentablemente, por sus acciones, que ese es el camino elegido.