Carta abierta a Doña Lucía
Daniel Manduré
Una vez más Doña Lucía Topolansky habló. Supo estar de los dos lados del mostrador. Como guerrillera, probando suerte y levantándose en armas desde 1963 contra las instituciones democráticas para luego usufructuando las bondades que solo brinda la democracia y la voluntad soberana en las urnas confirmándola en cargos políticos de los más relevantes. Es desde allí, con su estilo característico, muy parecido al de su pareja de vida y consultada en una entrevista sobre si había realizado el Frente Amplio la suficiente autocrítica después de la derrota electoral, respondió:” El Frente Amplio fue el único partido con autocrítica, mientras que el Partido Colorado estuvo 93 años en el gobierno y aún seguimos esperando por lo menos un rengloncito de autocrítica”. Esa rara habilidad de escaparse por la tangente, esa estrategia rancia de ver “la paja en ojo ajeno y no la viga en el propio”. De eludir respuestas criticando al otro.
Vamos a repasar un poco de historia Doña Lucia, la concreta, la de hechos y no esa historia falsa, hemipléjica, plagada de medias verdades que con mucha habilidad su fuerza política ha intentado imponer.
Ud. ha integrado Doña Lucía, como protagonista, el gobierno más nefasto que se conoció en la República, el de Mujica. Lo decía hace solo unos pocos días en una nota pública Richard Reed, no un enviado del neoliberalismo, un prestigioso dirigente sindical que es votante de su fuerza política, él decía: “Mujica hizo demagogia barata y con el empezó la lumpenización de la sociedad”. Ante esto huelgan los comentarios.
Todos la recordamos hasta el día de hoy Doña Lucía por tener la habilidad de ver títulos de licenciado que no existen, solo por defender con uñas y dientes a un corrupto. O como cuando tuvo que salir a pedir disculpas a la sociedad uruguaya de profesionales, hablando de licenciaturas de 6 meses y refiriéndose a un título de profesional como “ese cartoncito”. Con un total desprecio al esfuerzo, la constancia y la dedicación de los uruguayos.
Su fuerza política en apenas 15 años batió todos los récords Doña Lucía, fundiendo la única empresa uruguaya de navegación aérea de pasajeros, intentando sin escrúpulo alguno presentar compradores truchos. Cuando los que fueron procesados por este tema recibían órdenes expresas de Mujica.
No nos olvidamos de que fueron partícipes de otro hecho inédito llevando a la quiebra a un ente monopólico como Ancap al que hubo que recapitalizar para poder salvar. Ni que hablar de que tienen en su haber al único vicepresidente en la historia de la nación procesado por corrupción. También recordamos las “joditas” se su amigo del alma en la empresa Envidrio, el que terminó, como debía, también procesado por la justicia.
No olvidamos Doña Lucía Se acuerda de la frase Doña Lucía: “yo para vender unos kilos de naranjas a los yanquis me tuve que bancar a 5 locos de Guantánamo” …seguramente la tiene muy presente, cuando algunos ilusos pensábamos que los movía un espíritu humanitario.
¿Recuerda cuando en forma conveniente anunciaban con Mujica, con bombos y platillos en el 2013 que al finalizar su gestión iban a adoptar entre 30 y 40 niños y se los iban a llevar a vivir a la chacra? Claro, después entendimos que los obnubilaba la idea de lograr el Premio Nobel que solo desde la ingenuidad y desconocimiento de la realidad uruguaya alguien pudo plantear. Pero para ello era necesario lanzar alguna propuesta enternecedora, con los “5 locos de Guantánamo” no alcanzaba. El Premio Nobel y para salvar el prestigio del mismo no se concretó y por supuesto que los niños aún esperan Doña Lucía…
No nos olvidamos cuando nos gritaban y prometían educación, educación y más educación, pero nos dejaron el más grande deterioro educativo y de valores de la historia. No olvidamos Doña Lucía que mientras nos hablan de democracia y libertad, en su fuerza política aún se festeja el acto asesino y cobarde de la toma de Pando.
La vemos hablar y criticar con tanta autoridad a otros partidos Doña Lucía que nos comenzamos a acordar de otras perlitas: del tren de los pueblos libres por ejemplo que yace herrumbrado en algún terreno baldío de la vecina orilla o como le decía irónicamente Zabalza a Daniel Martínez en su visita a Santa Catalina: “¿Ve aquello que está allá bajo agua enterrado?… ese fue otro regalito que nos dejó el Pepe”…refiriéndose a los 150 millones de dólares despilfarrados en el fracaso absoluto de la regacificadora.
Pero como usted comparó a su partido con el mío Doña Lucía, permítame hablarle de mi Partido, el Partido Colorado, que con errores y aciertos, luces y sombras fue el constructor de la república, el de las más grandes transformaciones sociales, políticas y de derechos. El partido que desde los campos de Carpintería y desde la derrota forjo los destinos de la nación. ¿Cometimos errores Doña Lucía? Por supuesto. ¿Tomamos decisiones políticas o de gobierno no siempre adecuadas? Sin dudas
El soberano nos lo hizo saber y no hay mayor sanción que esa.
Pero al hacer un balance a lo largo de la historia, no hay casi nada en la vida del país que no tenga el sello del partido de Rivera.
No hemos tenido que exportar referentes o ídolos porque siempre los tuvimos aquí entre nosotros Doña Lucía. Mientras Uds. Idolatran a Lenin, Stalin, al Che Guevara, a Fidel, Chávez, Maduro y le entregaban la llave de la ciudad y consideraban personaje ilustre al dictador Daniel Ortega, nosotros reivindicamos a Rivera, Domingo Arena, Baltasar Brum,
Joaquín Suarez, Batlle y Ordóñez, Grauert entre tantos otros.
En el 2002 mientras Ud siguiendo a Tabaré Vázquez andaba gritando default, lo que nos hubiera llevado a la quiebra del país, otros, como Batlle, Atchugarry y un gran equipo negociaban denodadamente por salvarlo. Cosa que se pudo concretar y nos otorgó credibilidad y confianza como país. Gracias a eso recibieron en el 2005 la casa en orden y al decir del propio Tabaré Vázquez la recibieron en muchas mejores condiciones que como se la entregó Mujica al iniciar su segunda presidencia.
Es así Doña Lucía, datos de la realidad. Ese es el Partido Colorado, hoy herido y disminuido en lo electoral, es verdad, pero el de las más grandes obras de la historia. El del Estado de bienestar laico y republicano. El que abrió las puertas a los inmigrantes, creando Villa Cosmópolis. El de la ley de 8 horas, de las pensiones a la vejez, de las indemnizaciones por accidentes de trabajo.
El que con Amézaga creaba los consejos de salarios y que con la ley 10783 le otorgaba con la atenta mirada de la región y del mundo los derechos civiles a la mujer. El de la ley de divorcio por el solo consentimiento de la mujer. El partido que por ley creaba los liceos departamentales y que con Pedro Figari veía nacer la Escuela de Artes y Oficios, la que después daría paso a la Universidad de Trabajo (Utu). El Partido de la reforma vareliana o el que creaba el IPA en 1951.
¿Quiere que hablemos de infraestructura Doña Lucía? ¿Quién cree ud que creó las principales plazas, parques, hospitales y facultades? Entre 1906 y 1912 se creó el Hospital Español, el Pereira Rossel, las Facultades de Química y Agronomía, la Universidad de la República y hasta la Rural del Prado. También en esa época se comenzaba a delinear el Parque Urbano, el que se conocería después como Parque Rodó.
Con intendentes colorados se construía la rambla montevideana en sus diferentes tramos, con Fabini Intendente se iniciaba en 1922 el primer tramo, el de la rambla sur. Con Ramón Benzano se delineó el Parque Batlle, se prolongó la rambla de Pocitos y se trazaron las avenidas Boulevard Artigas y España.
Banco de Seguros, República, BPS, continúan la larga lista de obras de las tantas que nos quedan en el tintero.
No puedo olvidar el Código de la niñez de Adela Reta o de los Centros Caif y las escuelas de tiempo completo del presidente Sanguinetti.
¿El Frente Amplio quiere comparar gestión Doña Lucía?, pues comparemos!!
¡Quieren hablar de autocrítica? ¡¡Pues hablemos!!
Un partido con neta vocación de gobierno, con profundas raíces republicanas. Con luces y sombras. Con debilidades y fortalezas, errores y aciertos, como sucede en todo grupo humano o colectividad, pero que lo ha dado todo y que aún tiene mucho para dar.
Ese es el Partido Colorado Doña Lucía, siga reivindicando la toma de Pando defendiendo a Sendic, a Placeres, homenajeando al Che, a Fidel o a Maduro que el Partido Colorado continuará como lo ha hecho siempre construyendo república.