El Impulso.
Ricardo Acosta
Este domingo, Uruguay vivió una jornada electoral de alta participación que reflejó el compromiso cívico de los uruguayos. Las urnas dieron su veredicto inicial: la Coalición Republicana, encabezada por Álvaro Delgado, reunió un sólido 47% de los votos, mientras que el Frente Amplio, representado por Yamandú Orsi, alcanzó el 43.7%. La suma de esfuerzos entre el Partido Nacional, el Partido Colorado y otros aliados consolidó un bloque fuerte de cara al balotaje de noviembre. En este contexto, el Partido Colorado destacó con un notable 17%, subrayando su rol decisivo dentro de la Coalición y reafirmando su influencia en la política nacional.
Si bien las redes sociales han sido un espacio de expresión para todos, su clima fue diferente: la paz cívica que dominó la jornada electoral no se reflejó ahí. En su lugar, la hostilidad hacia quienes votaron por la Coalición se hizo evidente, con comentarios en tono de desdén y hasta de malos perdedores. Las campañas negativas en redes intensificaron el encono, y algunos simpatizantes del Frente Amplio no dudaron en menospreciar las decisiones de otros, un acto que atenta contra el respeto en democracia. Como dijo alguien en redes: “Si le hablas mal al que vota distinto a vos, nunca lo vas a convencer de que vote igual que vos”. Una frase que resume el valor de la tolerancia y la convivencia democrática que muchos piden.
Para el balotaje, la Coalición se perfila con propuestas concretas y un compromiso con la transparencia, la seguridad y el empleo. En contraste, el Frente Amplio intenta reposicionarse, pero el electorado parece inclinarse hacia una visión de país con menos dependencia estatal y más oportunidades. Además, la Coalición Republicana cuenta con el impulso y la experiencia del Partido Colorado, que se convierte en un socio esencial en el camino hacia una gobernanza efectiva y balanceada.
El resultado de este domingo deja a Uruguay ante una oportunidad clave: consolidar un proyecto de desarrollo y estabilidad donde todos los partidos de la Coalición trabajen como equipo. La victoria en el balotaje significaría un respaldo claro a las políticas que los uruguayos ya han elegido apoyar, y el rol del Partido Colorado será decisivo en esa tarea. En noviembre, Uruguay podrá dar un paso firme hacia una democracia fortalecida, donde el esfuerzo y el respeto a los valores republicanos predominen.