Mitsotakis; entre radicales
Lorenzo Aguirre
El Primer Ministro griego, el conservador Kyriakos Mitsotakis, ganó las presidenciales, y con mayoría absoluta llevará adelante su nuevo mandato hasta el año 2027. Con una demografía electoral de 9.200.000 habilitados registrados, solamente se presentaron a las urnas 5.275.000 – pautando un lamentable porcentaje de concurrencia – para una segunda vuelta luego de las elecciones del pasado mes de mayo. “Nueva Democracia”, principal partido de centroderecha – en 1974, junto a su fundador, Konstantinos Karamantis, formó parte del tercer gobierno de la Tercera República Helena -, se impuso en todas las regiones (a excepción de Rodopi, en la cual ganara “Syriza”), obteniendo el 40.56%, y logrando, como expresáramos, mayoría absoluta, pues de acuerdo a las leyes, recibió 50 escaños adicionales, llevándolo finalmente a 158 asientos en el “Vouli” (Parlamento Heleno). Muy atrás de Mitsotakis, con apenas 17.83% llegó “Syriza” (coalición de izquierda radical, fundada por trece grupos, entre socialistas, marxistas leninistas, maoístas, trotskistas, eurocomunistas, y euroescépticos), contabilizando 47 escaños. Mitsotakis, ha jurado su cargo de Primer Ministro – en la sede de la presidencia griega, ante la Jefa de Estado, Katerina Sakelaropulu, y el arzobispo Jerónimo II de Atenas -, y rápidamente nombró su nuevo Ejecutivo, donde 14 en 20 – 6 más que en el gobierno anterior -, conformaron el pasado gabinete de Mitsotakis.
“Nueva Democracia” gobernará en solitario gracias a la prima de 50 bancas que, a partir de estas elecciones, volvió a regir en el sistema mixto de representación proporcional, reglamentación aplicada desde 1974, y que fuera eliminada durante el gobierno de Tsipras, hoy, enfrentando el momento más crítico de su trayectoria política, pues ha renunciado luego de tres fracasos consecutivos, y la aplastante derrota frente al conservador Kyriakos Mitsotakis.
Alexis Tsipras, primer ministro de izquierda en Grecia, y principal figura de “Syriza” – partido considerado tóxico, con discursos divisorios -, al renunciar está dando pie a que, el “Partido Socialista” (“Pasok”) se proyecte con fuerza de ahora en adelante, rescatando en buena parte, el espacio de izquierda.
De ser así, Grecia podría volver a su política de siempre, con alternancia en el poder entre “Nueva Democracia”, y “Pasok”, dejando finalmente de lado la izquierda radical de “Syriza”, la cual, estando en el poder, armó un código rupturista, dando además prioridad al gasto social frente al pago de una deuda de 200% del PIB.
En junio de 2015, Alexis Tsipras llamó a un referéndum sobre el tema austeridad; más del 60% de la ciudadanía respaldó la propuesta, pero, Tsipras, firmó igualmente el rescate para que Grecia no fuera expulsada del euro, por no cumplir con la contención de gastos.
De ahora en más, “Syriza” llevará adelante un comportamiento pleno de rispidez, de confrontación, con el “Partido Socialista”, el cual durante diez años estuviera estancado, a la sombra, y olvidado, por “Syriza”.
Ocupando el tercer lugar en estas elecciones aparece entonces el “Partido Socialista Panhelénico” (“Pasok”), con 11.86%, y 32 escaños. Posteriormente, muy lejos, el “Partido Comunista de Grecia” (“KKE”), 7.68%, y 20 lugares parlamentarios, después la formación de ultraderecha “Espartanos”, 4.68%, y 13 bancas, seguido por el ultraconservador “Solución Griega”, 4.45%, y 12 asientos, y el fundamentalista cristiano “Victoria” (“Niki”), 3.69 %, y 10 representantes al parlamento.
Por su parte, el “Frente Europeo de Desobediencia Realista” (“MeRA25”), quedó fuera del “Vouli”, hecho convertido en revés compulsivo para Yanis Varoufakis, economista – pero de ideología radical “anticapitalista”, aunque posee una buena colección de euros, y alguna “humilde toldería nómada” para vacacionar – integrante de la “Internacional Progresista” (fundada por el senador norteamericano Bernie Sanders), organización que “pretende luchar contra los ascensos de movimientos neoliberales y de extrema derecha, los cuales ponen en riesgo derechos sociales, civiles, y políticos”, según la “homilía” de los mencionados “avatares”.
A la sombra del naufragio…
nuevo Primer Ministro
Las elecciones ocurrieron a la sombra del naufragio ocurrido al oeste del Peloponeso, donde perdieron la vida cientos de personas del sobrecargado pesquero con 750 inmigrantes procedentes de Egipto, Siria, Pakistán, y Palestina, hecho que provocara duras críticas sobre la forma en la cual, las autoridades griegas trataron el asunto.
En la contienda por los asientos del poder, el crecimiento de la ultraderecha puede en cierta medida oscurecer los cuatro años de gobierno de Kyriakos Mitsotakis, pues, desde la restauración de la democracia en 1974 – luego de siete años de dictadura -, el Parlamento no estaba conformado por una derecha radical.
Ahora, el flamante Primer Ministro – al no ganar en primera vuelta no recurrió a pactar con otras formaciones políticas, quedando de esa forma sin compromisos para negociar, asegurándose un gobierno propio, sin coalición –, cuya cautela y estabilidad en el aspecto económico a través de un Ejecutivo conservador ha llevado a Grecia a mejorar su situación financiera (el crecimiento económico supera hoy la media europea) y lograr una caída de la deuda pública, está estimulando a sostenidas inversiones extranjeras.
Es oportuno señalar que, Mitsotakis, ha subsidiario la calefacción, el transporte, como así también establecer un significativo aumento a jubilados y pensionistas, a la vez que, en forma paralela, el salario mínimo, el cual se encuentra en 832 euros.
Al parecer, Grecia, tendrá un gobierno de continuidad, sin ligaduras con la ultraderecha, no como grita y miente a los cuatro vientos la ultraizquierda retrógrada que, sí, es servíl al comunismo internacional.
De todas formas, Mitsotakis, tendrá que luchar por un lado contra los embates del abiertamente racista, antiinmigración, anti “LGTBI”, ultra religioso, y prorruso “Niki”, por otro, con el ultraconservador “Solución Griega”, y el xenófobo “Espartanos” – su presidente, Vasilis Stigas, señaló que, ahora, se tendrá una voz nacional, y agradeció el apoyo de Ilias Kasidiaris, líder del ilegal partido nazi “Amanecer Dorado” -, quienes aumentaran considerablemente la representación parlamentaria, y por supuesto contra el “Partido Comunista de Grecia”, que elucubra un plan para desestabilizar al nuevo gobierno.
Kyriakos Mitsotakis, tendrá que gobernar entre radicales.
¡Que lo dioses del Olimpo, lo sostengan!