Positivos resultados económicos pese a
complejo contexto regional e internacional
Jorge Bonino
La economía uruguaya transitó en forma exitosa el ejercicio 2022, que estuvo caracterizado por un contexto regional e internacional sumamente complejo, que incluyó importantes coletazos de la pandemia de Covid 19 (con China otra vez como protagonista central) , y la guerra provocada por la invasión rusa a territorio ucraniano apenas comenzado el año y con reiteradas amenazas de devenir en un conflicto nuclear y global.
En grandes líneas los resultados a nivel macro coinciden con los pronósticos oficiales y propician expectativas positivas para el año en curso, dado que se completó el proceso pos emergencia sanitaria. .
En un escenario internacional con altos niveles de inflación Uruguay mostró una variación de precios que puede considerarse como razonable, y que fue de 8,29%, levemente por encima del crecimiento del año 2021, que se situó en 7,96%.
Los rubros que aumentaron en el entorno del promedio general o por encima de este fueron (en orden descendente de variación):
-Alimentos y bebidas no alcohólicas 11,77%
-Restaurantes y servicios de alojamiento 10,74%
-Salud 9,66%
-Seguros y servicios financieros 9,24%
-Servicios de educación 8,4%
-Cuidado personal, protección social y bienes diversos 8,27%.
Tuvieron subas inferiores al promedio general:
-Recreación, deporte y cultura 8,17%
-Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles 7,66%
-Bebidas alcohólicas, tabaco y narcóticos 6,77%
-Mobiliario, enseres domésticos y demás arts. regulares de los hogares 5,77%
-Ropa y calzado 4,73%
-Transporte 2,95%
-Información y comunicación 0,1%.
Inflación alineada a promedio mundial
Según las previsiones del Fondo Monetario Internacional la inflación promedio a nivel mundial fue en 2022 del orden de 8,8 %, impulsada en buena medida por el incremento récord que registraron los precios de los alimentos.
Por lo tanto, la inflación de Uruguay se alineó con la inflación internacional e incluso se ubicó levemente por debajo de ella. Brasil con solo 5,9% y Paraguay con 8,1% (o sea apenas dos décimas menos que Uruguay), mostraron variaciones razonables de precios, mientras que en Chile la inflación llegó a 12,8%. Argentina con 94,8% y Venezuela con 305%, alcanzaron tristemente el cuarto y el primer lugar entre los países con mayor inflación en el mundo, respectivamente.
En la Unión Europea la inflación promedio fue de 10,4% (en la Euro zona 9,2%). Solo siete de los miembros de la UE tuvieron crecimientos de precios iguales o inferiores al promedio mundial, siendo España con 5,5% el país con menor inflación del grupo. Reino Unido también alcanzó un guarismo superior al promedio mundial con 10,7%, nivel similar al de la UE, en tanto que EE.UU. registró 6,5%, Japón 4% y China 2%.
Importante crecimiento del consumo privado
En el tercer trimestre de 2022 el PIB creció 3,7% respecto a igual período de 2021 y se mantuvo estable en términos desestacionalizados respecto al trimestre anterior.
El consumo privado tuvo un importante crecimiento del orden de 7,0% y el consumo de los hogares 4,4%, mientras que el consumo público cayó 3,5% por reducción de gastos de salud (por fin de la emergencia sanitaria) y variación de existencias.
Por el lado de la oferta el mayor crecimiento se dio en el rubro “Comercio y Suministro de comidas y bebidas” con un 10,8% (incidencia de 1,4 %), lo que según el BCU se debió a la apertura de fronteras y al consecuente aumento del gasto de turistas no residentes. En “Actividades profesionales y arrendamientos” el crecimiento fue de 9,3%, en “Construcción” 8,4% y en “Transporte, almacenamiento y comunicaciones” 7,2%.
Hubo por el contrario contracciones en los rubros “Agropecuario, Pesca y Minería” (-7,4%), “Industria Manufacturera” (-2,8%) y en “Actividades de administración pública” (-1,3%).
El resultado del año 2022 se conocerá a comienzos del segundo trimestre del año en curso, pero según estimó la Ministra de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche, el crecimiento del PIB se ubicará en torno a 5%.
Leve recuperación del salario real
El índice medio de salarios aumentó 9,41% en el año 2022 (el del sector privado 9,62% y el del sector público 9,04%), y el índice medio de salarios nominales 9,82% (sector privado 10,04% y sector público 9,42%), porcentaje este último que se aplicó para el ajuste de las pasividades a partir del 1° de enero de 2023.
Al haber aumentado el índice medio de salarios 9,41% y el IPC 8,29%, el índice medio del salario real alcanzó un leve crecimiento del orden de 1,03% en el año 2022 (sector privado 1,22% y sector público 0,68%), en línea con el objetivo de recuperación paulatina del salario real que había anunciado el gobierno.
Exportaciones alcanzaron récord histórico
Las exportaciones tuvieron en 2022 una extraordinaria performance, alcanzando el monto récord desde que existen registros de 13.356 millones de dólares, cifra que representa un incremento de 16,5% respecto de 2021.
El principal destino volvió a ser China, que adquirió el 28% del valor total de los bienes exportados. El segundo socio comercial fue la Unión Europea, que recibió el 15% de las exportaciones uruguayas; el tercero fue Brasil con 14%; el cuarto Argentina con solo 9% del total; y el quinto EE.UU. con 6%. Esos cinco destinos concentraron el 72 % de las exportaciones uruguayas en el pasado ejercicio.
En cuanto a los bienes exportados, el mayor monto correspondió a carne bovina con US$ 2.557 millones, cifra que representa el 19,1% del total de ventas al exterior. En segundo lugar con US$ 1.922 (14,4%) se ubicó la soja y en tercer lugar la celulosa, con US$ 1.818 millones (13,6%). Las exportaciones de estos tres tipos de bienes sumaron US$ 6.297, es decir, casi la mitad del monto total de ventas al exterior en el 2022.
Mejora del mercado de trabajo
También en el mercado de trabajo hubo buenas noticias, ya que se crearon más de 40.000 puestos netos de trabajo respecto a 2021, cifra consistente con las proyecciones incluidas en la Rendición de Cuentas y que había anunciado en febrero de 2022 la Ministra Arbeleche.
En diciembre de 2022 la tasa de actividad para el total del país se situó en 62,7% (en Montevideo 63,8% y en interior 62%) frente a 62% en 2021. El índice de empleo se mantuvo en 57,7% (en Montevideo 59,2% y en interior 56,8%) como en 2021 y la tasa de desempleo fue de 7,9% (en Montevideo 7,1% y en interior 8,4%), mientras que el año anterior había sido del 7%, o sea que aumentó casi en un punto porcentual.
La realidad (datos del mercado de trabajo de todo el 2022 y PIB anual hasta el tercer trimestre) muestra la certeza de las estimaciones del gobierno, lo que refuerza la credibilidad y previsibilidad de la política económica.
Déficit público global de 3,2% del PIB
En cuanto a las finanzas del sector público, hubo una reducción de un punto del PIB en el déficit del Gobierno Central – BPS respecto de 2021, excluyendo los ingresos al Fideicomiso de la Seguridad Social (FSS).
Dicho resultado se alcanzó pese a una disminución de los ingresos de 0,5% del PIB, debido a que los egresos primarios se redujeron en 1,3% del PIB, destacándose la caída de 0,6% del PIB en el rubro “Gastos No Personales”, al disminuir las erogaciones asociadas a la emergencia sanitaria y al incremento de 0,4% del PIB en “Inversiones”.
El resultado primario corriente de las empresas públicas fue de 1,0% del PIB (disminuyó 0,5 respecto al año anterior, por la reducción del resultado de UTE que en 2021 había tenido ganancias extraordinarias por exportaciones), mientras que el resultado global de las 19 Intendencias fue de 0,1% (igual que en 2021) y el del Banco de Seguros del Estado fue de 0,2%, con un descenso de 0,1% en relación a 2021.
El resultado del sector público no financiero se situó en -2,6% del PIB incluyendo el FSS, y en -2,8 excluyendo los ingresos del fideicomiso.
El resultado global del BCU fue de -0,7% del PIB (aumentó 0,3% respecto de 2021), con una reducción en la carga de intereses de 0,3% del PIB.
El sector público global tuvo un déficit de 3,2% incluyendo los ingresos del FSS y de 3,6% excluidos dichos ingresos.
Opinión positiva de calificadoras
La buena performance de la economía nacional se ve reflejada por ejemplo en las opiniones de las calificadoras internacionales de crédito, que han mantenido el grado inversor de nuestro país e incluso han mejorado la perspectiva de la deuda externa uruguaya, lo que permite reducir el costo financiero de los intereses, acceder a crédito más barato y favorecer las inversiones en el país.
Por ejemplo, en el mes de noviembre la agencia canadiense DBRS Morningstar subió la nota de deuda soberana en moneda extranjera de BBB- a BBB, con perspectiva estable. En octubre, la japonesa R&I también había subido su calificación, pero de BBB a BBB+, la máxima calificación alcanzada en su historia por la deuda externa uruguaya. Además, el grupo Fitch ya había mejorado en diciembre 2021 la perspectiva de la deuda uruguaya, elevándola de negativa a neutra.
Un año con perspectivas positivas
Para el 2023 las previsiones extraoficiales permiten visualizar un año con perspectivas positivas aunque con notas “agridulces”.
Se prevé que el PIB crecerá entre 2,2 y 3% (acorde al ritmo “normal” de la economía uruguaya) y que la inflación seguirá descendiendo gracias al muy buen manejo monetario del Banco Central -que seguramente tomará nuevas medidas para seguir avanzando en su objetivo de lograr que el peso uruguayo sea una moneda de calidad-, aunque el incremento del IPC estaría por encima de 7%, o sea, que seguiría todavía por encima del límite superior del rango meta (6%).
En el mercado laboral se espera la creación de nuevos puestos de trabajo, aunque en forma mucho más moderada que lo acontecido en 2022 y el salario real continuaría su proceso de recuperación paulatina.
La tasa de desempleo se mantendría en el actual nivel o incluso podría tener una leve suba. Una de las principales preocupaciones en esta materia es la persistencia de altas tasas de desempleo en los segmentos de población más joven y con menor educación, así como también entre las mujeres de todas las edades.
Las exportaciones estarían 2% por debajo del monto récord alcanzado en 2022, ya que se observarían menores niveles de precios para lo principales rubros de nuestro comercio exterior y también la contracción de algunos mercados y, en particular, la desaceleración económica que se prevé ocurrirá a nivel regional. En contrapartida, las importantes acciones de apertura de mercados y de promoción de acuerdos comerciales desarrolladas por el gobierno en 2022, podrían comenzar a rendir sus primeros frutos en el año en curso.
El valor total de las exportaciones uruguayas en 2023 se estima que se situaría en poco más de US$ 13.000 millones.
En síntesis, en principio estaríamos ante un año sin mayores contratiempos y en el que se podría dar otro pequeño paso hacia la concreción de los objetivos fijados por el gobierno al elaborar su presupuesto quinquenal, ratificando la orientación y solidez de la política económica en ejecución, aunque se deberá poner especial atención a la evolución del mercado de trabajo.