TABARÉ VIERA
“Un batllista probado” y “el ciudadano
con más representatividad política”
Jorge Bonino
En apenas 20 días los ciudadanos uruguayos definiremos las autoridades partidarias para los próximos cinco años y quiénes serán los candidatos únicos de cada partido para las elecciones nacionales del próximo 27 de octubre.
En el caso del Partido Colorado esta elección interna tiene una importancia mayor que otras, puesto que si o si implicará una renovación de liderazgo en la conducción de la colectividad que más ha ejercido el gobierno en la historia nacional. Desde las elecciones internas de 1982, cuando se dio un paso trascendental con miras al retorno del país a la vida democrática, esta será la primera elección interna en que no serán protagonistas principales ninguno de los extraordinarios líderes que ha tenido el Partido Colorado desde entonces.
Es hora pues, de asegurar un nuevo conductor que esté dispuesto a dejar todo en la cancha para fortalecer a la colectividad de Fructuoso Rivera y José Batlle y Ordóñez.
Se necesita un político con experiencia, con dedicación, con responsabilidad, con capacidad de negociación, con probada fe colorada y batllista, para orientar y conducir al Partido en uno de las etapas más críticas de su gigante historia, cuando los grandes estadistas que lo guiaron ya no están en el ruedo. Se seguirá contando claro con las enseñanzas que han legado y también con la posibilidad de recurrir a los consejos del Presidente Julio María Sanguinetti, pero la responsabilidad de iluminar el camino deberá que asumirla alguien que esté a la altura del trascendente desafío.
Seis precandidatos disputan hoy tan alta distinción y responsabilidad. Una oferta electoral propia de un partido liberal, que da cabida a diferentes concepciones respecto a la acción de gobierno, aunque siempre bajo una única bandera democrática y republicana.
Cada uno de estos candidatos -cuatro hombres y dos mujeres-, han venido comunicando a la ciudadanía sus convicciones, ideas y propuestas, de diferente manera y por diversos medios. Algunos lo han hecho más que nada a través de las redes sociales y de las entrevistas periodísticas, otros han dado prioridad al hasta ahora nunca superado mano a mano con la gente, mientras que otros han optado por privilegiar la inversión en publicidad. Para algunos, el esfuerzo ha sido hacerse conocer incluso dentro del núcleo más duro del coloradismo, mientras que otros han basado su campaña en sus recientes actividades públicas. Pero de los seis precandidatos presidenciales, solo uno muestra toda una vida dedicada a la política, al Partido Colorado y al servicio público.
Quien desde 1982 ha tenido una permanente y continua militancia, ha integrado los órganos de conducción partidaria, ha ocupado altas posiciones a nivel de gobierno departamental, de empresas públicas y de gobierno nacional, y ha sido legislador en ambas Cámaras, es Tabaré Viera.
Diputado, Director de Ose, Vicepresidente y Presidente de Antel, Intendente de Rivera por dos períodos consecutivos (primer Intendente reelecto en ese Departamento), Ministro de Turismo y Senador, Tabaré Viera ha tenido una destacadísima labor en todos los puestos que ha desempeñado.
Al decir de Jorge Batlle (entrevista publicada por El Observador el 24 de mayo de 2015): “el ciudadano que tiene más representatividad política es Tabaré Viera, sin ninguna duda, porque es el que tiene más éxito en el lugar donde en cada elección ha probado su capacidad de trasmitir sus ideales y ser recibidos esos ideales por la gente”.
Y como dice actualmente Julio María Sanguinetti, Tabaré Viera es “un batllista probado”, que “afirma la unidad de todos los colorados y la lealtad a la coalición que ha integrado.” “Un voto seguro. Confiable. Para seguir adelante.”
El Partido Colorado necesita un conductor que ofrezca certezas, transparencia, dedicación y permanencia, que no se vea tentado por ofertas en posiciones en empresas privadas nacionales o extranjeras, ni que lo apabullen los desafíos ni las diferencias de posiciones. Una persona con ideas claras, propuestas ambiciosas pero realizables, capaz de conformar equipos de trabajo con “propios” y “ajenos”, con foco en las personas, en los trabajadores, con experiencia de liderazgo político y de ejercicio de gobierno. En síntesis, los ciudadanos deberían tener en cuenta, como mínimo, estas condiciones a la hora de elegir.
Y quien reúne esas condiciones sin duda alguna, y solo él las reúne, es: TABARÉ VIERA.